Fernando Alonso concluye la carrera en la decimotercera posición después de haber partido desde un prometedor séptimo lugar en la parrilla, logrado gracias a una excelente actuación en la clasificación bajo condiciones de lluvia. Sin embargo, el inicio de la carrera se complica rápidamente para el piloto español cuando sufre un incidente con Lawson, lo que provoca una pérdida inmediata de posiciones que afecta el desarrollo de su estrategia.


Problemas en la salida y desarrollo de la carrera

El contacto con Lawson en la primera curva no solo le hace retroceder varias plazas, sino que también compromete el ritmo de su Aston Martin durante las primeras vueltas. A medida que avanza la prueba, los retrasos en las paradas en boxes de otros competidores no logran beneficiarle lo suficiente, y el notable rendimiento de los coches Haas en pista le impide recuperar el terreno perdido, consolidando su caída hasta el decimotercer puesto final.

Factores que influyeron en el resultado

A pesar del buen trabajo en la clasificación bajo la lluvia, la combinación del incidente inicial y la falta de ritmo en comparación con equipos como Haas demuestra las dificultades del Aston Martin para mantener posiciones en carrera. La estrategia no pudo compensar estos contratiempos, dejando a Alonso fuera de los puntos en una jornada que comenzó con expectativas más altas.

Parece que la lluvia sabe esconder los problemas del coche, pero la carrera en seco los revela con una claridad que duele más que un adelantamiento por el interior.