Cyberdyne desarrolla el HAL for Care Support, una variante especializada de su exoesquelelo Hybrid Assistive Limb. Este modelo no está pensado para cargar objetos pesados, sino para ayudar al personal sanitario cuando atiende a pacientes. Su función principal es asistir en tareas físicamente exigentes que se realizan de forma repetitiva, como ayudar a una persona a sentarse en la cama, levantarse de una silla o girar sobre el colchón. El sistema amplifica la fuerza del cuidador que lo viste, reduciendo la fatiga muscular y el riesgo de sufrir lesiones.


El sistema detecta la intención de movimiento mediante biosensores

La tecnología central del HAL se basa en interpretar las señales bioeléctricas que los músculos generan al intentar moverse. Unos sensores en la piel del usuario captan estas señales débiles y el sistema las procesa para anticipar la acción que el cuidador quiere ejecutar. Entonces, los actuadores del exoesqueleto entran en funcionamiento y proporcionan la fuerza asistida necesaria para completar el movimiento de forma suave y sincronizada. Esto permite que la ayuda sea intuitiva y no suponga un obstáculo en la rutina de trabajo.

Monitoriza la postura para prevenir lesiones laborales

Además de asistir con fuerza, la unidad integra sensores que monitorizan constantemente la postura del cuidador durante las maniobras de asistencia. El sistema analiza los ángulos de la espalda y las articulaciones, y puede alertar si detecta una posición que pueda forzar la columna vertebral o causar una distensión muscular. Este enfoque busca prevenir las lesiones por esfuerzo repetitivo y los problemas lumbares, que son comunes entre los profesionales que mueven pacientes a diario.

Un cuidador equipado con este traje robótico podría, en teoría, ajustar con precisión milimétrica la almohada de un paciente, aunque el paciente solo quería que le dieran la vuelta al canal de la televisión.