La Federación Española de Baloncesto (FEB) modifica su estructura deportiva para funcionar con más eficacia y adaptarse al nuevo contexto. Este cambio responde a la tendencia de que jóvenes talentos nacionales se trasladen a competir en Estados Unidos. El objetivo es crear una red de seguimiento de jugadores que destaque a nivel global y reforzar el vínculo con estos atletas.


La FEB impulsa una red global de seguimiento

La federación planea establecer un sistema de identificación y análisis de jugadores extenso y meticuloso. Esta red pretende localizar y evaluar a los deportistas españoles que se desarrollan en cualquier liga del mundo, con especial atención a la NCAA estadounidense. La implicación directa del seleccionador nacional, Chus Mateo, es una pieza clave en este proceso para mantener un contacto fluido.

Reforzar el sentimiento de pertenencia a la selección

Más allá del aspecto técnico, la renovación busca que los jugadores perciban el apoyo de la institución. La FEB y Mateo trabajarán para que los atletas, aunque estén lejos, sientan que forman parte de lo que denominan La Familia. Esta estrategia personal pretende potenciar su compromiso futuro con los equipos nacionales y asegurar su disponibilidad cuando sean convocados.

No será extraño ver a Mateo haciendo más videollamadas transatlánticas que un ejecutivo de ventas, todo por asegurar que el próximo fenómeno del baloncesto lleve la camiseta de España.