Texturas que se pueden tocar… literalmente. La empresa Anker ha vuelto a dar la campanada, esta vez no con powerbanks, sino con una impresora UV que convierte superficies planas y cilíndricas en lienzos texturizados. La EufyMake E1 no solo imprime imágenes, sino que simula relieves y acabados físicos gracias a capas de tinta UV endurecida. ¿El resultado? Un nuevo juguete para creadores de props, diseñadores gráficos, artistas de producto y, si te apuras, para impresionar en cenas familiares.


Kickstarter se quedó pequeño

Con más de 46.7 millones de dólares recaudados, esta campaña no solo ha roto récords en la plataforma, sino que ha despertado la envidia de más de un estudio de render sin presupuesto. La E1 permite imprimir directamente sobre madera, plástico, cuero, vidrio y aluminio, en formas planas o cilíndricas. Básicamente, si puedes modelarlo, puedes decorarlo.

La E1 no solo imprime texturas, también imprime ilusiones. Y si todo falla… siempre podrás texturizar tu frustración en 1200?dpi.

¿Herramienta pro o trampa de marketing?

Claro, la letra pequeña también importa. La tinta no es barata, el mantenimiento no es trivial y el software aún está afinándose. Algunos usuarios ya están debatiendo si el coste operativo hará que tu botella personalizada cueste más que el champán que contiene. Pero, como siempre, el hype es más barato que el disolvente UV.