Hay cosas que no te tienen por qué gustar ni compartir, pero que debes respetar. Eres libre de expresar tu opinión sobre ciertos colectivos, pero siendo consciente que tus manías y prejuicios nunca jamás deben condicionar los actos de otra persona. En el caso de la lesbiana deberías ser capaz de aislar tus manías personales a la hora de emitir un juicio justo sobre el tema, y te darías cuenta de que el hecho de que la tía prefiera comer marisco a zanahoria es irrelevante a la hora de educar a un niñó.Tengo 29 también tengo una edad me hago mayor. Ahora en serio, sí, tengo prejuicios, pero prefiero decirlo que no ser falos e hipócrita y opinar como todo el mundo para quedar bien.
No sé, del mismo modo que no me gustan según qué razas, tampoco me gustan según qué tendencias sexuales, no las comparto, pero no puedo decir que no pienso como pienso, solo porque no está bien visto que sea así.
Si eres consciente de que tienes prejuicios ya tienes la mitad del trabajo hecho.