Agradezco los comentarios y el desvelo que mostráis por mi integridad física y psíquica, al comprobar las reducidas dimensiones de mi cuchitril. Llevo más de un año durmiendo en ese nicho y hasta ahora ningún percance. Puedo sentarme en la cama sin golpearme con el techo, aunque mi pelona cabeza si lo roza. La altura de la habitación es de 2,70 metros y dispongo, entre el soporte de la cama y el techo de 80 cm. Afortunadamente soy lo bastante retaco para parecerme un espacio abrumador.
Mientras escribía este mensaje han aparecido cuatro estrellitas, me he alegrado y sonreído.
Bueno, gracias de nuevo.