La competencia entre las marcas chinas ya no se limita a los vehículos eléctricos. Tras consolidar su posición en ese segmento, los fabricantes dirigen su innovación hacia los motores de combustión interna. Dongfeng Motor ha revelado un nuevo propulsor de gasolina que logra una eficiencia térmica cercana al 50%, un dato que sitúa a la tecnología china en la vanguardia de este campo tradicional.


La tecnología detrás del nuevo motor

Este motor alcanza un 45,18% de eficiencia térmica máxima, según las pruebas de certificación. Para lograr esto, Dongfeng implementa un sistema de recirculación de gases de escape que mejora la combustión. También optimiza la gestión térmica y reduce la fricción interna de los componentes. La marca afirma que este desarrollo permite ahorrar combustible y reducir las emisiones de forma significativa respecto a motores anteriores.

El contexto de la industria automotriz china

Este avance ocurre cuando el mercado global debate el futuro de los motores de combustión. Mientras muchas empresas occidentales centran sus inversiones en electrificar, los fabricantes chinos demuestran que pueden innovar en ambas direcciones. Desarrollar motores de gasolina más eficientes les permite cubrir una demanda global que aún depende mayoritariamente de esta tecnología, especialmente en mercados emergentes y en segmentos de vehículos comerciales.

Parece que la transición energética tendrá una parada técnica para repostar gasolina de alta eficiencia. El mensaje es claro: no subestimes a quien ya domina cómo fabricar y ahora perfecciona cómo quemar.