Las tormentas submarinas están generando un impacto directo en la plataforma de hielo del glaciar Thwaites, conocido popularmente como el glaciar del fin del mundo. Estas corrientes cálidas erosionan la base del hielo, lo que provoca grietas y desestabilización en su estructura. El fenómeno se intensifica debido al cambio climático, aumentando la frecuencia e intensidad de estos eventos oceánicos.


Mecanismo de deshielo submarino

El proceso comienza cuando masas de agua más cálida provenientes de las profundidades oceánicas chocan contra la base del glaciar. Este contacto continuo derrite el hielo desde abajo, creando cavidades que debilitan la unión entre la plataforma y el lecho rocoso. A medida que estas cavidades crecen, el hielo pierde su anclaje natural y se acelera su deslizamiento hacia el mar.

Consecuencias para el nivel del mar

La pérdida acelerada de hielo en el glaciar Thwaites podría elevar el nivel global del mar en varios centímetros en las próximas décadas. Este glaciar actúa como un tapón natural para otras masas de hielo en la Antártida Occidental, por lo que su colapso desencadenaría una reacción en cadena. Las comunidades costeras de todo el mundo enfrentarían inundaciones más frecuentes y severas.

Parece irónico que el agua, que normalmente apaga el fuego, sea ahora la que alimenta esta catástrofe glaciar a cámara lenta.