Los periódicos deportivos destacan por sus llamativas portadas que combinan fotografías de acción con tipografías impactantes y elementos gráficos vibrantes. En el mundo del texturizado digital, recrear este estilo periodístico requiere un enfoque específico que Foundry Mari facilita mediante su sistema de capas y herramientas de pintura procedural. La clave reside en simular tanto el grano del papel como la intensidad cromática que caracteriza estas publicaciones.


Preparación del proyecto y base de texturas

Iniciamos importando nuestro modelo 3D del periódico y asignando un material básico con canal alfa para transparencias. Creamos un nuevo canal de color y aplicamos un fondo blanco ligeramente texturizado usando el generador de ruido con configuración fine grain para emular la superficie del papel. Ajustamos los niveles de contraste hasta lograr una base realista pero sutil que no interfiera con los elementos superiores.

Composición de elementos gráficos y tipografía

Sobre la base de papel, pintamos las áreas principales donde irán las fotografías utilizando máscaras de selección. Importamos las imágenes deportivas y las ajustamos con corrección de color para aumentar saturación y contraste, típico de las portadas deportivas. Para los titulares, creamos capas de texto vectorial usando la herramienta de texto de Mari, aplicando efectos de bisel y sombra paralela para dar tridimensionalidad.

Los elementos secundarios como logotipos y recuadros los añadimos en capas separadas con modos de fusión overlay para integración visual.

Ajustes finales y detalles de realismo

Unimos todas las capas y aplicamos un filtro de grano fotográfico uniforme para homogeneizar la apariencia. Ajustamos ligeramente la curva de color hacia los cyan y magenta para simular la impresión offset. Finalmente, exportamos las texturas en formato EXR manteniendo canales separados para difuso, roughness y altura, listas para usar en cualquier motor de render.

Si tu portada queda tan perfecta que parece salida de imprenta, quizá deberías añadirle alguna mancha de café o doblez casual para hacerla creíble