Y yo, aunque posiblemente sea la roja la que acepté sin darme cuenta. Este documental pretende manipular a las masas haciéndonos creer que existe una alternativa a nuestra vida insulsa, plagada de impuestos y pagos, mientras un puñado de ricos egoístas no solo viven mejor que nosotros, sino que además dirigen nuestras vidas y el curso de la civilización a su voluntad. Ok.
A lo largo de la historia siempre han salido propuestas así, la religión (cualquiera de ellas) bien de una vida en el cielo, los ufólogos de viajes interplanetarios y si ya nos metemos en materia gnosticista flipamos fijo.
Siempre aparece alguien tratándonos de vender la moto con que hay un mundo hermoso y oculto al que solo podemos acceder si seguimos sus convicciones.
El documental da por hecho todo lo que cuenta y no deja espacio a que el espectador reflexióne, tratando de contagiarlo de una convicción paranoica a base de un desfile hipnótico de gráficas, grabaciones de políticos de las que se han extraído los fragmentos que refuerzan la causa despreciando el contexto, y demás zarandajas. Dicho de otro modo:
No pienses lo que te estoy diciendo, créeme y punto.
En la tercera parte comparan a Bush con Hitler. Si de verdad hubieran pruebas palpables capaces de demostrar que los métodos de gobierno de Bush son equiparables a la ideología nazi, sería el bombazo político y mediático de toda la historia. Estados unidos sufriría un colapso tremendo y Bush sería condenado inmediatamente a la inyección letal, sin embargo, nada de eso está ocurriendo, a pesar de que el documental juega a convencer al espectador de que lo que ha descubierto es cierto.
¿El objetivo de todo esto?
Eso solo sabrá el realizador, que querrá hacerse un renombre en el mercado, conseguir fondos para su próximo documental con fines comerciales, recrearse sembrando la incertidumbre o todo a la vez.
Y digo yo.
1-. Pasar de cualquier dato con claros fines sensacionalistas.
2-. Prestar atención solo ha hechos empíricos y demostrables.
3-. Valorar las cosas buenas de nuestra vida cotidiana.
4-. No obsesionarse ni malvivir ambiciosamente persiguiendo una supuesta vida mejor cada vez que alguien nos bien de ello.
¿Seguir estos 4 sencillos pasos no sería elegir la pastilla roja? Al fín y al cabo, nadie opta por ellos nunca.