Refuge VFX se adentra en el universo postapocalíptico de Fallout, la adaptación televisiva del célebre videojuego de Bethesda, y despliega una gama de efectos visuales tan devastados y radioactivos como el mundo que retratan. Su trabajo no solo embellece los paisajes destruidos, sino que refuerza el contraste entre la estética retrofuturista de los refugios y la brutalidad oxidada del exterior.
El equipo de Refuge usó Houdini para simular desintegraciones, tormentas de arena radiactiva y colapsos estructurales que parecen arrancados de un páramo nuclear. Maya y ZBrush fueron clave para modelar criaturas mutantes y elementos tecnológicos como los icónicos trajes de poder, que luego fueron integrados en Nuke con cuidado de conservar una paleta de color deslavada y amarillenta.
La serie juega con la ironía visual
Mundos en ruinas bajo cielos brillantes, melodías de los años 40 sonando mientras estallan granadas. Los efectos respetan esa dualidad, mezclando lo grotesco con lo nostálgico. Cada chispa, cada partícula de polvo que flota entre los restos de un supermercado abandonado, ha sido diseñada para evocar decadencia… y belleza.



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