Dassault Systèmes y el diseñador francés Patrick Jouin acaban de presentar algo que podría estar sacado perfectamente de un render de SolidWorks o Catia: la silla Ta.Tamu. Lo curioso es que no hablamos solo de un diseño bonito. Aquí entran en juego conceptos como gemelos virtuales, optimización topológica y simulaciones en tiempo real. Todo, claro, dentro de la plataforma 3DEXPERIENCE, conocida en el sector del diseño industrial y CAD por su potencia para ingeniería avanzada.


Una estructura inspirada en la naturaleza (pero sin florituras innecesarias)

La silla pesa solo 3,9 kilos, pero aguanta hasta 100 kilos de carga. ¿El truco? Una estructura de celosía basada en principios de biomímesis, inspirándose en cómo la densidad ósea y las articulaciones humanas distribuyen las cargas. Esto no solo reduce material, sino que además permite que la silla se imprima en 3D en una posición plegada, lista para desplegarse... y sin necesidad de montaje posterior. Imagina meterla en tu escena de Blender o 3ds Max como asset y listo, ni un solo clic de ensamblaje.

Diseño generativo con conciencia ecológica

El proceso no ha sido cuestión de improvisar una malla y mandar a imprimir. Han sido cuatro años de trabajo donde cada iteración del modelo virtual ha pasado por análisis de ciclo de vida, simulaciones de carga y optimización de las zonas de presión. Gracias a esto, el diseño final tiene un 75% menos de material respecto a un modelo de densidad completa, pero sigue siendo estructuralmente seguro.

De la Solid Collection a la impresión sin soportes

Para quienes siguen el trabajo de Patrick Jouin, esto no es una sorpresa total. Ya en 2004 empezó a experimentar con impresión 3D en mobiliario con su colección Solid. Esta nueva colaboración con Dassault Systèmes, que empezó en 2019, se centra ahora en el diseño generativo y estructuras desplegables. Lo que antes era teoría de render ahora es una realidad física... aunque con el tamaño justo para que aún te quepa en el viewport sin ralentizar tu escena.

Y lo mejor de todo...

Dicen que el diseño está inspirado en la eficiencia de la naturaleza. Lo que no dicen es que si la naturaleza tuviera que esperar cuatro años para sacar una silla, probablemente seguiríamos sentados en el suelo.