Si necesitas cubrir un área a esa escala deberías usar una textura más amplia, una fotografía más lejana que sea mucho mayor el plano, partiendo siempre de la idea de cubrir todo el área sin repetición.
Una fotografía para textura debe ser en la medida de lo posible lo más plana posible en iluminación, así como uniforme. Cuidando también especialmente el enfoque, ya que hay que procesarla posteriormente para ser aplicada.
Las correcciones básicas para preparar una textura son, corregir la distorsión esférica de la lente, uniformar el enfoque y el oscurecimiento en la zona no Focal.
Si vas a necesitar tileado, hay que trabajar además la textura para que encaje perfectamente en los cuatro costados, sin que se note línea de unión. Usualmente repetición reflejada.
La eliminación de la percepción de repetición de una textura es un proceso muy artístico y cualquier técnica o método lo consiga es perfectamente valida. Una habitual es aplicar una o más de una capa encima con texturas procedurales con fractales, afectando al Diffuse, con mezcla y/o como máscara.
El objetivo es romper la regularidad que produce la repetición, y terminar de eliminar el efecto de rejilla que producen las zonas de los extremos.