Creo que no hay mensaje de este mejunje inconexo de escenas grabadas con la cámara digital que el señor Lynch se acababa de comprar en el Media Markt. 3 hora de tostón supremo de las que sobran, así sin cortarme un pelo, 2 horas y 59 minutos de desvarío fruto de un tripi en mal estado. El minuto que salvo corresponde a cuando una pedazo de morena muestra sus gloriosas tetas.
El resto, pues eso, una tontería sin sentido. Llego a pagar para verla en el cine y le prendo fuego.