La edición de bases o base editing es una técnica de ingeniería genética que permite cambiar una sola letra o nucleótido en el ADN sin cortar la doble hélice. A diferencia de CRISPR-Cas9, que actúa como unas tijeras moleculares, esta herramienta funciona más como un lápiz químico que corrige directamente un error tipográfico en el código genético. Esto la hace potencialmente más segura y precisa para corregir mutaciones puntuales que causan enfermedades.


Cómo funciona el proceso de editar bases

El sistema combina una versión inactiva de la enzima Cas9, que solo se une al ADN pero no lo corta, con una enzima desaminasa. Esta enzima es la que realiza la química para convertir un nucleótido en otro, por ejemplo, cambiar una citosina (C) por una timina (T), o una adenina (A) por una guanina (G). La proteína Cas9 modificada guía todo el complejo al lugar exacto del genoma que se quiere corregir, donde la desaminasa ejecuta la modificación química.

Las ventajas y los límites de esta tecnología

La principal ventaja es que evita los cortes de doble cadena en el ADN, lo que reduce el riesgo de ediciones no deseadas, deleciones o reordenamientos cromosómicos. Esto es crucial para aplicaciones terapéuticas. Sin embargo, la técnica no puede insertar o eliminar grandes fragmentos de ADN, y su ventana de edición es limitada. Además, puede generar conversiones de bases no deseadas en el sitio objetivo, un efecto llamado edición fuera de blanco.

Aunque suena a ciencia ficción, imagina intentar corregir un error en un libro cambiando solo una letra, pero usando una herramienta que a veces también subraya palabras al azar en otras páginas. El desafío sigue siendo perfeccionar la precisión absoluta.