Su diseño, compuesto enteramente por facetas planas, desvía las ondas de radar para reducir su firma. Este enfoque, junto con su color negro mate, le permite penetrar defensas aéreas densas. Aunque se retiró oficialmente, algunas unidades siguen volando en misiones limitadas para probar tecnologías y tácticas.


El diseño facetado define su perfil furtivo
El avión mide 20,09 metros de largo, 13,20 de envergadura y 3,78 de altura. Su forma icónica, con alas en flecha y cola en V, resulta de la necesidad de optimizar la dispersión del radar. Cada panel plano refleja la energía lejos del receptor, lo que hace que el avión sea muy difícil de detectar para los sistemas tradicionales.

Su armamento se transporta internamente
Para mantener su sigilo, el Nighthawk lleva todo su armamento en una bahía interna. Esta puede albergar dos bombas guiadas por láser GBU-27 Paveway III, lo que le permite atacar objetivos de alto valor con precisión sin comprometer su perfil radar. Esta configuración prioriza la furtividad sobre la capacidad de carga.

Su apariencia angular y futurista, que inspiró muchas naves en películas de ciencia ficción, a veces hacía que pareciera más un objeto de un estudio 3D que un avión real volando en el mundo físico.