El cadáver exquisito es una técnica surrealista originada en el movimiento dadaísta, ideal para sesiones creativas en grupo, donde cada participante contribuye dibujando una sección de una figura, como la cabeza, y luego oculta su trabajo para que el siguiente artista continúe sin verlo, lo que resulta en composiciones impredecibles que desafían la lógica y estimulan la imaginación.
El proceso creativo
En esta actividad, el primer artista dibuja una parte específica, como la cabeza, y dobla el papel dejando solo marcas de conexión para guiar al siguiente, quien añade el torso sin revelar lo anterior, fomentando así una cadena de ideas libres que culmina en criaturas o escenas inesperadas, todo mientras se mantiene un flujo natural de colaboración.
Beneficios y aplicaciones
Esta técnica no solo libera la creatividad al eliminar la presión de la perfección, sino que también fomenta la experimentación en ilustración 2D, permitiendo explorar temas como el surrealismo y la abstracción, lo cual es especialmente útil para artistas que buscan superar bloqueos creativos o generar ideas innovadoras en proyectos colectivos.
Aunque el cadáver exquisito puede producir resultados que parecen salidos de un carnaval de lo absurdo, donde una simple cabeza de elefante termina en un cuerpo de robot, al final, nos recuerda que la verdadera diversión radica en abrazar el desorden como un aliado inesperado de la inspiración.
|Agradecer cuando alguien te ayuda es de ser agradecido|