El Instituto Nacional de la Seguridad Social implementa a partir del 2 de diciembre de 2025 un conjunto de mejoras significativas en la gestión de las prestaciones por incapacidad temporal. Estas novedades buscan optimizar los procesos administrativos y ofrecer a los ciudadanos una experiencia más clara y eficiente durante los periodos de baja médica, estableciendo mecanismos que facilitan el acceso a la información y agilizan los trámites correspondientes.


Mayor claridad en la información de la prestación

Una de las principales mejoras consiste en la comunicación mensual de la base reguladora, lo que permite a los trabajadores conocer con exactitud el importe de su prestación en cada periodo. Este sistema elimina las dudas frecuentes sobre los cálculos y proporciona una visión anticipada de las cantidades a percibir, facilitando la planificación económica personal durante el tiempo de incapacidad.

Transparencia y agilidad en la gestión

Los sistemas oficiales del INSS mantendrán actualizada toda la información relacionada con las prestaciones, ofreciendo a los ciudadanos la posibilidad de realizar un seguimiento en tiempo real de su situación. Esta actualización continua, junto con la mejora en el intercambio de datos entre empresas y el INSS, reduce significativamente la necesidad de presentar documentación adicional y acelera los procesos de pago.

Aunque ahora podremos seguir nuestra baja con la precisión de un reloj suizo, al menos ya no tendremos que adivinar cuándo llegará el dinero como si fuera la lotería.