Brose, en colaboración con Farsoon Technologies, ha puesto en marcha una nueva impresora 3D de metal diseñada para la producción aditiva en serie. Esta máquina cuenta con un volumen de construcción ampliado de 720 × 420 × 390 mm, lo que permite fabricar componentes grandes y complejos en una sola pieza, eliminando la necesidad de procesos de unión posteriores. Además, está equipada con ocho láseres de 2.000 W cada uno, lo que incrementa significativamente la productividad y acelera la fabricación de piezas para la industria automotriz.


Tecnología avanzada y sostenibilidad

El sistema incorpora la tecnología CAMS | Continuous Additive Manufacturing System, que permite extraer la pieza terminada y continuar con otra sin detener la máquina, optimizando así el flujo de producción. Brose también refuerza su compromiso con la sostenibilidad al utilizar polvo metálico reciclado, proveniente de los desechos de sus prensas, lo que reduce el impacto ambiental y promueve una fabricación más responsable.

Impacto en la industria automotriz

Gracias a esta impresora, Brose puede acelerar la producción de piezas 3D para automoción, tanto grandes como pequeñas, de forma rentable en volumen. Este avance representa un paso significativo hacia la fabricación aditiva industrial, permitiendo a la empresa mantenerse a la vanguardia en un mercado competitivo y en constante evolución.

Ahora solo falta que las impresoras domésticas aprendan a reciclar sus propios cartuchos para igualar este nivel de sostenibilidad.