La fabricación aditiva está dando un giro estratégico en el ámbito militar. El ejército de EE.UU. ha comenzado a imprimir drones y piezas directamente en unidades cercanas al frente, reduciendo tiempos de espera y dependencia de cadenas logísticas largas o vulnerables.


La guerra se repara en 3D

Un alto mando militar declaró que la impresión 3D será esencial para reparar componentes en zonas de combate, ya que la capacidad de producir repuestos o estructuras críticas directamente en el terreno cambia por completo el paradigma del suministro. Además, se prevé que en el futuro también puedan imprimir circuitos electrónicos, haciendo que incluso la tecnología más delicada pueda regenerarse en pleno conflicto.

Cuando el diseño deja de ser decorativo y se convierte en supervivencia

Desde una perspectiva de modelado 3D, estos desarrollos implican trabajar con geometrías funcionales, pensadas no solo para rendir estéticamente, sino para salvar vidas bajo presión. Y mientras tú perfeccionas una malla para que no tenga artefactos en el bake, ellos están diseñando estructuras que literalmente mantienen a flote la logística de guerra.