Elden Ring | El proceso creativo desde los bocetos iniciales

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Elden Ring Nightreign es un claro ejemplo de cómo la combinación de diseño gráfico, VFX y arte 3D puede elevar la experiencia de un videojuego. A través de sus impresionantes entornos y enemigos diseñados meticulosamente, el título explora el potencial del modelado 3D para crear paisajes y criaturas que no solo son visualmente impactantes, sino que también reflejan la atmósfera sombría que caracteriza a FromSoftware.

El uso de efectos visuales avanzados, como las tormentas eléctricas generadas por habilidades especiales, demuestra cómo los VFX son fundamentales para enriquecer la narrativa visual del juego. Estos detalles no solo son impresionantes, sino que también cumplen una función esencial en la jugabilidad, creando una experiencia inmersiva que fusiona arte y tecnología de manera innovadora.

El diseño gráfico también se extiende a la representación de la geografía de las Tierras Intermedias, donde los escenarios no son simples fondos, sino una extensión activa del sistema de juego, con cada rincón del mapa ofreciendo algo único a la experiencia del jugador. Los personajes, con sus habilidades y ataques visualmente distintivos, reflejan cómo el arte 3D no solo da forma a los protagonistas, sino que también contribuye a la dinámica del juego. Elden Ring Nightreign demuestra cómo el diseño gráfico, los efectos visuales y la creación en 3D no solo sirven para hacer que un videojuego sea visualmente atractivo, sino que también son elementos esenciales para crear una experiencia jugable profundamente conectada con la narrativa del título.

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En Elden Ring Nightreign, la magia ya no funciona exactamente como en el juego original. Aunque la esencia se mantiene, los cambios en los controles y en la forma de acceder a los hechizos pueden confundir incluso a los jugadores más veteranos. Ahora, lanzar hechizos y conjuros requiere algo más que una buena memoria y reflejos rápidos; también hay que entender cómo están estructurados estos nuevos sistemas.

El jugador necesita equipar un báculo o un sello sagrado en una de las manos del personaje. Dependiendo de en qué mano lo lleve, usará distintos botones del mando para lanzar el primer o segundo hechizo asignado. Esto se traduce, por ejemplo, en usar RB o RT en Xbox si se lleva el arma mágica en la mano derecha, o LB y LT si se lleva en la izquierda. Algo similar ocurre en PC y PlayStation, con combinaciones adaptadas a cada plataforma.

Hechizos integrados en los objetos

Una diferencia importante respecto al Elden Ring original es que los hechizos no se recogen por el mundo ni se compran a maestros mágicos. En Nightreign, cada báculo o sello que se encuentra ya viene con dos hechizos predefinidos. Esto agiliza las cosas, pero también quita un poco de ese encanto de descubrir hechizos raros escondidos en rincones secretos. Lo curioso es que no hay requisitos de estadísticas para usar estos hechizos, aunque sí los hay para equipar algunos de los báculos o sellos más poderosos. Así que el jugador podrá lanzar conjuros desde el principio… siempre que tenga el equipo adecuado.

Combinaciones especiales con el toque del Recluse

Además de los hechizos tradicionales, existe una habilidad especial llamada Magic Cocktail, exclusiva del personaje Recluse Nightfarer. Esta permite absorber una especie de “residuo elemental” de los enemigos y, con eso, lanzar un hechizo especial. Es una especie de alquimia instantánea que añade un nivel más de estrategia mágica. Para activarla, basta con pulsar una combinación como Y + LT en Xbox, o E en PC.

Esta mecánica ha generado cierto interés entre diseñadores de efectos visuales, ya que ofrece una excusa perfecta para experimentar con shaders dinámicos y partículas reactivos, especialmente si se recrea en motores como Unreal Engine o Unity. También se pueden probar combinaciones con Houdini para simular esas nubes de energía residual y luego renderizar todo en Blender con Cycles o Eevee, dependiendo de si se busca más detalle o mayor velocidad.

Armas que lanzan magia, y cómo usarlas

En cuanto a las herramientas mágicas, las reglas siguen siendo bastante claras, los Glintstone Staffs sirven para lanzar hechizos ofensivos, mientras que los Sacred Seals se usan para conjuros más defensivos o de apoyo, como curaciones o mejoras. Sin embargo, no hay que subestimar los sellos, ya que algunos también incluyen ataques devastadores. Este enfoque dual permite al jugador diseñar su estrategia mágica como si fuera una paleta de herramientas digitales. De hecho, muchos artistas 3D comparan esta estructura con la de un proyecto bien organizado en Autodesk Maya o Cinema 4D, donde cada capa tiene su función, pero todas trabajan juntas para lograr el resultado final.

Un sistema mágico sin tanto misterio

Al final, todo este sistema se siente más directo y menos misterioso que en el juego base. Algunos lo agradecen, otros lo extrañan. Pero para quienes trabajan en 3D o VFX, esta lógica estructurada puede ser incluso inspiradora. ¿Quién no ha querido alguna vez lanzar un hechizo solo con arrastrar un nodo o pulsar un atajo de teclado? Al menos en Nightreign, eso está más cerca de hacerse realidad.

Y sí, puede que la magia no sea tan mágica como antes... pero al menos ya no tienes que hacer un doctorado en runas arcanas para entender cómo lanzar una bola de fuego.