Hombre, se me había pasado el hilo. Tiene narices que tal cómo está el tema, se discuta si una oferta de trabajo está bien redactada porque pide operadores 3d o debería poner artistas 3d, o que si me vas a llamar operario me indigno y paso, parece que el trabajo sobra y que el concepto a definir sea la forma, más que el fondo.
O que venga boba buy diga que si es levantar planos a 3d, (iluminar, puntos de vista, composición) eso sí es de operarios, pero que si es animar personajes, eso ya es de artistas, como si no hubiese ceporros animando personajes y haciendo verdaderas chapuzas, (con todo el derecho que tienen - Tenemos- Los ceporros a animar personajes o levantar planos 3d si les -nos- Apetece y se -nos- Lo pagan), y viceversa, pero claro, parece que hay que dejar claro que sigue habiendo clases y que un curro no es tan in como otro.
Por otro lado, si es la complejidad técnica lo que define el arte en un trabajo, yo nunca fui tan artista como cuando calculaba, ya hace unos cuantos años, las dimensiones y el trazado en el espacio, (espacio 3d, eso sí), de las tuberías del sistema de refrigeración de un Reactor nuclear, ya saben ustedes, para que no se caliente en exceso y se escapen los chilindrines, que luego pican.
Qué pena no saberlo entonces, mis dedos hubiesen volado ligeros e inspirados sobre la calculadora, matemáticas y trigonometría se habrían vuelto fuentes de inspiración. Un artista, como mola, y yo sin saberlo.
Operario, del latín operari, el que trabaja, y aquí trabajamos casi todos, el que pinta y el que tira de pala, y artistas, (si previamente nos ponemos de acuerdo en el concepto), hay o ha habido, más bien pocos.
Tratar de forma peyorativa el trabajo de otras personas es cuando menos imprudente, el trabajo del que pinta y el del que tira de pala o escoba.