Un vehículo autónomo recorre los campos de cultivo para controlar las malas hierbas sin usar herbicidas. Este robot, como el LaserWeeder de Carbon Robotics, se mueve de forma independiente entre los surcos. Su sistema de visión por ordenador analiza el terreno en tiempo real. El objetivo es distinguir las plantas cultivadas de las malas hierbas de forma precisa.


El sistema identifica las malas hierbas con visión artificial

El robot procesa imágenes con cámaras y algoritmos de aprendizaje automático. Estos algoritmos reconocen la morfología de cada planta. El sistema decide en milisegundos si un vegetal es una mala hierba. Esta identificación es el paso clave para actuar con precisión y no dañar el cultivo.

Un láser de alta potencia elimina las plantas no deseadas

Al detectar una mala hierba, el robot activa un láser de alta potencia. El haz de luz se enfoca directamente sobre la planta no deseada. La energía térmica del láser quema las células de la maleza de forma inmediata. Este método elimina la hierba sin alterar el suelo ni dejar residuos químicos.

El robot trabaja sin descanso, día y noche, lo que podría hacer sentir inseguras a las malas hierbas más ambiciosas. Su precisión es tal que parece tener mejor puntería que un jardinero con demasiada cafeína.