El seleccionador español femenino de balonmano, Ambros Martín, expresa su pesar tras la eliminación de las Guerreras ante Alemania en los octavos de final del Mundial. El equipo español se quedó a las puertas de los cuartos de final en un partido muy ajustado. Martín confía en que esta experiencia sirva para que el conjunto, joven y con margen para progresar, crezca de cara a los próximos compromisos internacionales.


El entrenador ve la derrota como un paso para aprender

Martín destaca el carácter de aprendizaje que debe tener este revés. Subraya que el plantel tiene una edad media baja y puede mejorar muchos aspectos de su juego. El técnico prefiere centrarse en el camino recorrido y en la evolución futura, más que en el resultado inmediato. Considera que enfrentarse a una potencia como Alemania en una fase decisiva aporta una lección valiosa.

El equipo español muestra su juventud y proyección

El combinado nacional demostró un buen nivel durante la fase de grupos, pero encontró un muro en la eliminatoria directa. Analistas coinciden en que el bloque tiene talento y una base sólida para construir a medio plazo. La federación respalda el proyecto de Martín, cuyo contrato se extiende más allá de este ciclo. El objetivo ahora es asimilar lo vivido y trabajar para estar más preparados en el próximo Europeo.

A veces, el margen para mejorar incluye aprender a marcar un gol más que el rival en los minutos finales, un detalle que suele cambiar las crónicas.