El próximo Mercedes-AMG GLC 53 EQ, la variante de alto rendimiento del SUV eléctrico, ha sido fotografiado durante sus pruebas de desarrollo en carreteras españolas. Aunque lleva un camuflaje más ligero que en ocasiones anteriores, aún oculta algunos de sus detalles definitivos, manteniendo la intriga sobre su diseño final. Este avistamiento confirma que la marca avanza a buen ritmo hacia el lanzamiento de su propuesta más deportiva dentro de la gama eléctrica EQ.


Un diseño camuflado pero con pistas claras

A pesar del envoltorio, se distinguen claramente las líneas musculares y la silueta característica de los modelos AMG, con pasos de rueda más anchos y un conjunto más agresivo que el del GLC eléctrico estándar. La parrilla, aunque tapada, sugiere el patrón vertical típico de AMG, y se aprecian grandes llantas y frenos de alto rendimiento. La parte trasera, sin tubos de escape, delata su naturaleza 100% eléctrica, aunque se espera que integre algún elemento difusor o alerón para enfatizar su carácter deportivo.

Potencia y tecnología bajo el capó

Se anticipa que este GLC 53 EQ utilice un sistema de tracción total con dos motores eléctricos, heredando la arquitectura del Mercedes-AMG EQE 53. Esto podría traducirse en una potencia que ronde los 600 caballos, permitiendo aceleraciones de 0 a 100 km/h en menos de 4 segundos. La gestión del sonido, con un posible sistema de audio que simule un rugido deportivo, y una suspensión adaptativa y más firme, serán clave para ofrecer la experiencia de conducción dinámica que promete el logotipo AMG.

Como es tradición en estos prototipos, el camuflaje parece diseñado más para generar expectación en foros y redes sociales que para ocultar algo que no podamos imaginar. Al final, todos sabemos que bajo esas pegatinas hay un SUV eléctrico rápido que intentará sonar como un V8.