FreeCAD se presenta como una alternativa gratuita y de código abierto para modelado paramétrico, ideal para usuarios que buscan diseñar piezas mecánicas, ensamblajes y objetos técnicos sin incurrir en costes de licencia. Permite trabajar con bocetos, restricciones y operaciones booleanas, lo que resulta útil para prototipado rápido y proyectos de impresión 3D. Sin embargo, su interfaz puede resultar menos intuitiva y pulida en comparación con soluciones profesionales como SolidWorks o Fusion 360, lo que puede afectar la fluidez del trabajo en escenas complejas.


Limitaciones en herramientas avanzadas

Aunque FreeCAD cubre necesidades básicas de diseño, carece de módulos avanzados para análisis estructural, dinámica de piezas y tolerancias industriales que sí ofrecen sus competidores de pago. Las herramientas de ensamblaje y simulación son más básicas, lo que limita su aplicabilidad en entornos donde se requiere alta precisión y optimización para manufactura. Además, el manejo de archivos grandes o proyectos complejos puede ser menos eficiente, afectando la productividad en tareas exigentes.

Integración en flujos de producción

La integración de FreeCAD con pipelines industriales profesionales es menor, lo que puede suponer un obstáculo para empresas que dependen de una compatibilidad completa con otros softwares y procesos de fabricación. En cambio, SolidWorks y Fusion 360 facilitan un diseño más preciso y optimizado, con simulaciones integradas y soporte para ensamblajes complejos, asegurando que los modelos se adapten a estándares industriales y reduzcan errores en producción.

Eso sí, siempre puedes presumir de ahorrarte una licencia mientras dedicas horas extra a buscar workarounds para esas funciones que el software gratuito no incluye, porque al fin y al cabo, el tiempo es dinero, ¿verdad?