Cita:
Yo las personas que con las que me llevaba que quisieron ser policías, todas decían que querían ayudar a los demás. Y lo peor de todo, es que lo pensaban realmente. Pero claro, después de hablar con ellas, y que te cuenten como son sometidos a múltiples técnicas de manipulación, tales como escuchar ciertas canciones propias de la guardia civil, exámenes psicológicos donde comprueban su capacidad de obediencia y la perturban, te das cuenta de que esas pobres personas, con una ideología en su base buena, fueron trasformadas y se han convertido en personas despreciables, y ni se dan cuenta de ello. Se convierten en el ejército droide, y se les roba definitivamente el alma.
Es un fenómeno que se repite en las fuerzas policiales y militares de varios países. Un buen ejemplo es el del ex policía de Nueva York sérpico, que no pudo encajar en el departamento por ser honesto y un nivel cultural superior al de sus conpañeros. Pero en parte la culpa es de nosotros los civiles que en determinadas épocas aprobamos el mal trato policial hacia los que eran diferentes. Por ejemplo, en los 60s la policía detenía arbitrariamente a los hippies y les cortaba el pelo, eso era un evidente abuso de poder, pero la mayoría de los adultos de aquellos años, padres de los hippies incluidos, lo aprobaban.