Técnicas de venta y marketing

Tratándose de un foro de 3d en el que la gran mayoría de los que se dedican profesionalmente al tema son autónomos o hacen trabajos por su cuenta, veo necesario intercambiar experiencias relativas al trato con los clientes.

Hay muchos tutoriales en cuanto a renders, programas y demás, pero a la hora de la verdad lo importante es saber vender lo que hacemos, así que, desde aquí me gustaría abrir un hilo para desarrollar nuestras habilidades comerciales tan necesarias o más como los conocimientos de 3d.

Ahora no tengo tiempo, pero después os contaré algunas experiencias un tanto surrealistas con clientes que me han ocurrido en el pasado por si a alguno le ocurre lo mismo en el futuro.

A ver que os parece el tema.

Cita:

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Tratándose de un foro de 3d en el que la gran mayoría de los que se dedican profesionalmente al tema son autónomos o hacen trabajos por su cuenta, veo necesario intercambiar experiencias relativas al trato con los clientes.

Hay muchos tutoriales en cuanto a renders, programas y demás, pero a la hora de la verdad lo importante es saber vender lo que hacemos, así que, desde aquí me gustaría abrir un hilo para desarrollar nuestras habilidades comerciales tan necesarias o más como los conocimientos de 3d.

Ahora no tengo tiempo, pero después os contaré algunas experiencias un tanto surrealistas con clientes que me han ocurrido en el pasado por si a alguno le ocurre lo mismo en el futuro.

A ver que os parece el tema.

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Me parece una idea sublime.

Hablamos mucho de los problemas de Vray, pero en la calle también se encuentra uno algún que otro allocation client.

Yo drogo a mis clientes.

Tratándose de historietas de Jam. Voy a por palomitas.

Yo tengo una lista de tareas que no se acaba nunca, isitas en distintas provincias, control de muestras que se envían, alertas de obras, cambios de tarifas, de modelos, de catálogos, tengo que tener ropa de vestir siempre a punto, el coche a punto, la oficina ordenada, mi facturación y control de gastos, a veces pienso que voy a reventar.

Y encima, como un tonto, en mí tiempo libre en vez de volcarme en organizar mejor mi trabajo me pongo a escribir, dibujar y hacer 3d.

Cita:

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Ahora no tengo tiempo, pero después os contaré algunas experiencias un tanto surrealistas con clientes que me han ocurrido en el pasado por si a alguno le ocurre lo mismo en el futuro.

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Hace años, cuando la parte fuerte de mis ingresos eran los guiones, me ocurrió lo siguiente con un cliente:
Estaba leyendo un libro, las aventuras de un guionista en Hollywood. Y leí una cosa que contaba, que me hizo sospechar que a mí me pasaba lo mismo con un coordinador de guiones.

El tío era listo y, me lo hacía y yo no me daba cuenta, pero sospeeché, al leer aquel libro, sospeeché que me lo hacía.

Y era que a veces me corregía los guiones sin haberlos leído. Pero como las correcciones eran algo abstractas, concreciones que eran tópicos y lugares comunes. Y como el tipo lo hacía realmente bien, resulta que no te dabas cuenta.

Un día le entregué un texto y metí de capón una o dos secuencias enteras del último guión que le había entregado.

El tipo me llama para corregir, y dale con los lugares comunes, total, que ni una mención a las secuencias de capón que le había colado.

Me llevo el guión diciéndole que se lo corregía, y mientras volvía a casa, pensé que era el momento de dejar lo de los guiones y buscar otra cosa, total, tenía la Carrera, buen cv y un montón de cosas que enseñar.

Al llegar a casa, cogí el texto y eliminé esas secuencias.

Me puse a buscar curre.

Tres días después le llevé el guión sin tocar una sola coma (sólo borré las secuencias de palo que le había metido anteriormente). Lo leyó y me pagó sin decir nada.
(Por cierto, el tipo que había escrito aquel libro era uno que ganó Oscar a mejor guión, para que veáis que hay cosas que ocurren por igual, o parecidas, a los grandes y a los malditos).

Cita:

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Hace años, cuando la parte fuerte de mis ingresos eran los guiones, me ocurrió lo siguiente con un cliente: Estaba leyendo un libro, las aventuras de un guionista en Hollywood. Y leí una cosa que contaba, que me hizo sospechar que a mí me pasaba lo mismo con un coordinador de guiones.

El tío era listo y, me lo hacía y yo no me daba cuenta, pero sospeeché, al leer aquel libro, sospeeché que me lo hacía.

Y era que a veces me corregía los guiones sin haberlos leído. Pero como las correcciones eran algo abstractas, concreciones que eran tópicos y lugares comunes. Y como el tipo lo hacía realmente bien, resulta que no te dabas cuenta.

Un día le entregué un texto y metí de capón una o dos secuencias enteras del último guión que le había entregado.

El tipo me llama para corregir, y dale con los lugares comunes, total, que ni una mención a las secuencias de capón que le había colado.

Me llevo el guión diciéndole que se lo corregía, y mientras volvía a casa, pensé que era el momento de dejar lo de los guiones y buscar otra cosa, total, tenía la Carrera, buen cv y un montón de cosas que enseñar.

Al llegar a casa, cogí el texto y eliminé esas secuencias.

Me puse a buscar curre.

Tres días después le llevé el guión sin tocar una sola coma (sólo borré las secuencias de palo que le había metido anteriormente). Lo leyó y me pagó sin decir nada.
(Por cierto, el tipo que había escrito aquel libro era uno que ganó Oscar a mejor guión, para que veáis que hay cosas que ocurren por igual, o parecidas, a los grandes y a los malditos).

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Vaya, que escalofrío.

Otra también de aquella época. Va un realizador y en un alarde creativo, coge 3 guiones de 3 capítulos diferentes y los mezcla y hace un capítulo con ellos.

Nos llaman a los 3 y nos lo dicen.

Y nos dicen que lo que pagaban por un guión de un capítulo, a dividir entre tres.

Yo digo que nada de nada, que habíamos entregado un capítulo u cobrábamos cada uno un capítulo. Si el realizador se había levantado estupendo era problema de ellos.

Pero nada, la productora en sus trece.

Y entonces, uno de los otros guionistas dice que entonces si había que repartir, que habría que ver cuánto se había usado de cada guión en el capítulo, y a cada uno según lo que había sido usado.

Yo alucinaba.

Y entonces sale el tercero, mira los guiones y le dice al segundo que ha ver, que el lo había escrito a doble espacio, y que no lo veía claro.

Afortunadamente, aquella semana ya me salió un curro y pude ir dejando lo de los guiones.

Aquel guión troceado nunca fui a cobrarlo, del mal que ya me daba aquel gremio.

La mejor técnica de venta es un buen escote o una buena minifalda. La combinación de ambos es infalibe.

Cita:

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La mejor técnica de venta es un buen escote o una buena minifalda. La combinación de ambos es infalibe.

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Es cruel, pero es una verdad como un templo.

Cita:

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La mejor técnica de venta es un buen escote o una buena minifalda. La combinación de ambos es infalibe.

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Eso es sabido y no tiene mucho misterio.

Funciona si cliente=hombre meritorio=mujer.

Ahora estudiemos la variable cliente=mujer meritorio=hombre.
¿Qué nos recomiendas, Rebeca?

Cita:

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Eso es sabido y no tiene mucho misterio. Funciona si cliente=hombre meritorio=mujer. Ahora estudiemos la variable cliente=mujer meritorio=hombre.
¿Qué nos recomiendas, Rebeca?

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¿marcar paquete?

Estar muy bueno.

Cita:

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La mejor técnica de venta es un buen escote o una buena minifalda. La combinación de ambos es infalibe.

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Pues a mí no me ha funcionado.

En el caso de no estar bueno ni ser demasiado agraciado físicamente, la cosa está más complicada, pero ayudan ciertos trucos.

El aspecto físico es importante a la hora de causar una buena impresión en una persona que no nos conoce, pero también el lenguaje corporal dice mucho de uno mismo, así que, ya sabéis: afeitado (o barba bien recortada), bien peinado o despeinado, ropa ajustada sin ceñir, zapatos en lugar de zapatillas, evitar en la medida de lo posible los piercing (no sabemos que asociación de ideas provocaran en quien nos reciba y seguro que desvían la atención), mirar a los ojos y evitar desviarse hacia el escote o las piernas de la interlocutora o hacia los rincones de la estancia, sentarse erguido, hablar de uno mismo lo justo, no enrollarse con nuestros éxitos demasiado, preguntar lo que ella necesita, ofrecer soluciones concretas (para que vea que vamos a ayudar y no a aprovecharnos) y no sonar pedante son algunos de los detalles en los que nos fijamos todos de manera inconsciente y en el caso de las mujeres, más aún.

¿Me quito el anillo de casado o me lo dejo puesto?

Cita:

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Pues a mí no me ha funcionado.

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Pues ponte silicona.

Cita:

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¿Me quito el anillo de casado o me lo dejo puesto?

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A tu edad si te lo quitas darás mala impresión.

Cita:

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A tu edad si te lo quitas darás mala impresión.

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Me llama el director de marketing de la principal empresa importadora y distribuidora de madera la provincia para hacer un publirreportaje de sus nuevas y gigantescas instalaciones.

Vamos un compañero periodista, que hacía las veces de guionista, y yo como productor-realizador a entrevistarnos con él.
la idea: tratar de convencerlo de que nuestra empresa es la idónea para hacer su encargo, pues éste ya había pedido varios presupuesto s.

La estrategia: recopilar toda la información posible, sonsacar al tipo, hacerle hablar más de la cuenta. El director de marketing llevaba tan sólo un mes en el cargo.
la primera batalla: traje de chaqueta y corbata, que no me pega ni queriendo, pero a estos tipos les va ese peliculero.

Toda la conversación se centra en contarnos la historia de la empresa y de su dueño, de cómo pasa de ser un carpintero analfabeto con su carpintería a ser el mayor importador y distribuidor de madera y ahora montando grandes superficies de venta al público dedicado a todo lo relacionado con la madera con un capital de no sé cuántos mil millones. La virgen, nos cuenta (en confianza) que el esta especializado en temas de marketing comercial, pero en cuanto a medios de comunicación no ha tocado nada todavía y estaba un poco verde, y dije esta es la mía, ya te tengo, bribón. Empecé a darle caña, y le puse la cabeza como un bombo.

Al final nos dice, me habéis convencido, pero ya tenemos dos presupuestos, así que, por mi parte no hay problema, pero primero necesito un presupuesto y segundo la decisión la toma directamente el dueño.
recapacitando: tenía a un supuesto experto en marketing como director que en confianza nos había confesado que no tenía ni idea. Lo cual nos abría una puerta. Pero por otra parte tenía que presentar un presupuesto y tenía al dueño de la empresa que no sería tan tonto, cuando de la nada había montado un imperio.

Total, eran unas instalaciones nuevas, un día de rodaje, el guión, el montaje unas 150.000 pesetas, pero por error no había puesto el punto detrás del 150, así que, en el presupuesto la cifra eran 150000 pesetas.

Segunda batalla: la entrevista con el dueño.

Lo primero que hice fue olvidarme de la chaqueta, sé que estos tipos suelen ser desconfiados y si veía algo extraño se daría cuenta, así que, me puse mi chaleco de siempre.

El despacho era enorme, gigantesco y al fondo, detrás de una mesa un tipo bajo y rechoncho, parecido al actor Danny de vito. Nos acercamos y nos dimos la mano. El tipo nos estrujó la mano, señal inequívoca de autoestima y autoconfianza, de tener cierto complejo de superioridad. En principio no me preocupó, pero empecé a ver detalles que me llamaron la atención. Justo detrás de su mesa tenía un enorme panel con una fotografía de carné de cada uno de sus empleados con su nombre y marcadas con chinchetas de colores la productividad, faltas de asistencia, etc. Su secretaria de encargaba de actualizar el panel diariamente.

Bueno, después os cuento el resto, que me voy a comer.

Que emocionante. Acaba ya con el postre que esto está muy interesante.

Véis como Jam sabe de esto, nos mete hasta los cortes publicitarios, el tío.

Cita:

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Véis como Jam sabe de esto, nos mete hasta los cortes publicitarios, el tío.

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Pure marketing.

Cita:

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Su secretaria de encargaba de actualizar el panel diariamente.

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Creo que aquí está el quid de la historia Jam, tío, despierta de la siesta, que nos tienes en ascuas.

Vaya, que me acabo de despertar, voy pitando para la oficina y continúo.

Cita:

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Vaya, que me acabo de despertar.

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Como vives, mamón.

Venga hombre, no cuentes más batallitas y descubre tus secretos, que mañana tengo que ir a vender un proyecto y últimamente me encuentro con clientes gays con los que no funciona la estrategia del escote.

Rebeka, pues marca un buen paquete o eso, o deja caer por accidente un par de entradas para algún concierto de Miguel Bosé.

Cita:

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Venga hombre, no cuentes más batallitas y descubre tus secretos, que mañana tengo que ir a vender un proyecto y últimamente me encuentro con clientes gays con los que no funciona la estrategia del escote.

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Dile que has tocado a Enrique iglesias en uno de sus conciertos y que no te has lavado la mano, te la lameran y firmaran lo que sea.

Jam tío, dale con la historia.

Jam: ¿Cádiz, madera? ¿nueva fabrica en a, de los g? A ver, podría llamarsele señor P? Yo lo único que se de marketing es que.

De cualquier producto hay mucha competencia.

Que sólo es caro aquello que no vale lo que cuesta.

Que siempre hay alguien que compra el producto que sea.

Que vender lo más barato no tiene tanto mérito.

Que siempre hay otro producto similar más barato y otro más caro.

Que si no lo vendes tú ya lo intentara otro.

Que al final, depende de la persona que vende, la gente quiere quejarse a la cara de alguien y eso no lo pueden hacer por internet.

Lo bien que me hubieran venido esos consejos hace un mes con un cliente de 2x2x2.

Al lío. El tema este ha surgido al hilo de lo que contó Pit del tipo que se las daba de listo y corregía sin haberse leído los textos. Pues éste cliente era uno de esos que sin saber de lo que estás hablando esta intentando averiguar si lo estas engañando.

Pulsa el botón del interfono y avisa a la secretaria para que suba un tal fermín. Sigue pulsando botones y se bajan las persianas, se corren las cortinas, se baja una enorme pantalla de vídeo y se humilde aquello en una especie de sala de cine. Tengo que reconocer que aquello empezó a asustarme.

Entró el tal fermín en plan japonés, haciendo reverencias con la cabeza como el que está totalmente fuera de lugar, con una cámara de vídeo doméstica en la mano y la enchufó en el proyector de vídeo.

El cliente nos explicó que fermín era el que más sabía de madera, pero que de cámaras no tenía ni idea, haciendo chistes fáciles, y fermín asentía con la cabeza como disculpándose en todo momento. Yo me esperaba una tremenda porquería. El tema me estaba empezando a incomodar.

Y comienza la proyección, algunos movimientos bruscos de cámara, chistes del cliente que si tienes el párkinson y tal, pero una vez que la cámara esta puesta en el trípode empieza a tomar planos bien encuadrados y bien tomados, la grabación estaba de miedo. No hay que olvidar que se trataba de un máster de cámara (una cinta sin editar, directamente de cámara). Cada vez que el cliente hacía una crítica me miraba como buscando mi apoyo o aprobación a lo que el estaba diciendo y yo hacía gestos con la cabeza como diciendo vaya porquería. El compañero que venía conmigo me decía por lo bajini - fastidiar, yo no lo veo tan mal, y yo le decía, tú calla y sígueme.

Por fin terminó la angustiosa proyección. El cliente le dijo a fermín que recogiera sus trastos y se fuera otra vez a la madera que era lo suyo. Yo cogí a fermín por el hombro le y dije que, aunque su interés había sido bueno no tenía ni idea y que se pasara por la productora que le daría alguna que otra clase si seguí interesado.

A lo que el cliente terminó diciendo: - Lo ves, fermín, no tienes ni idea. Lo que yo te he dicho. (aquella noche sentí cargo de conciencia).

El cliente siguió vanagloriándose de sus logros, de cómo había conseguido su imperio, de que ha el nadie lo engañaba porque tenía un sexto sentido. Que el sólo quería lo mejor y a los mejores. Aquello se estaba convirtiendo en una especie de partida de ajedrez. Llegó un momento en que di el asunto por perdido, me llegué a convencer de que sería incapaz venderle la moto.

Así que le dije a mi compañero, dame el presupuesto. ¿para qué? -damelo, y en medio de una de las batallas que estaba contando el cliente le interrumpí y le dije, perdón el servicio, ah sí, al fondo a la derecha.

Me fui directo al servicio, saque el presupuesto, saqué un rottring que llevaba y le añadí un cero con mucho arte, convirtiéndolo en un millón y medio. Y dije no te vas a salir con la tuya.

Al volver mi compañero seguía hablando con él, le pedí disculpas y con disimulo le di el sobre. En ese momento estaba diciendo el cliente; -este fin de semana he estado en Londres y me he comprado la mejor cámara del mercado, al menos eso me han dicho. No sé si he hecho bien, mi mujer dice que me he gastado un dineral en un capricho.

Saca de debajo de la mesa una Nikon f4 con un objetivo nikor 80-200 f2.8 y un flash sb 24 (hablamos de un millón de pesetas).

Mi respuesta : - Ha hecho mal y ha hecho bien. (ya con decisión y deseando irme).

El tío pega un salto de la silla, y eso?
Pues ha hecho mal en comprarla en Londres, porque si la compra en Londres, Rodolfo Biber que es el importador en España no le cubre la garantía con lo cual tendría que enviar la cámara a Japón y entre una cosa y otra se quedaría dos meses sin cámara en caso de avería. Pero ha hecho bien, porque realmente es la mejor cámara del mercado y entonces saqué mi f4 exactamente igual con un objetivo igual y un flash igual que llevaba en la bolsa para hacer alguna fotografía fija.

El tío que estaba al borde del infarto en un momento después del subidón se quedó más suave que un guante, así que, aproveché para darle el presupuesto, ante la cara de flipé de mi compañero y sin la más mínima protesta por parte del cliente lo aceptó.

Lo bueno cuesta caro, y si es muy bueno, dos veces caro.

Cita:

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Eso es sabido y no tiene mucho misterio. Funciona si cliente=hombre meritorio=mujer. Ahora estudiemos la variable cliente=mujer meritorio=hombre.
¿Qué nos recomiendas, Rebeca?

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Yo trabajé 3 años y medio de comercial agresivo total, tengo anécdotas para aburrir, tuve la suerte de estar con un equipo de primera, aunque íbamos solos, pude ir con todos y cada uno de ellos y vi como vendían todos, en el equipo había de todo, escotes de infarto, tíos con muchas horas de gimnasio, y sobre todo auténticos troleros.

Os cuento una anécdota de un compañero:
Íbamos juntos para el curre, yo a mi zona y el a la suya que quedaba más ceca que la mía, decidimos echar el café entre su zona y la mía porque nos quedaba lejos del hotel y así no perdíamos tiempo (echablamos más horas que un reloj), y el tenía un cliente muy cerca del hotel y el resto a tomar vientos, de modo que subió al piso del cliente y yo me quedé abajo en la calle esperando, a los cero coma, aparece de nuevo mi compañero y sorprendido le digo que porqué había tardado tan poco, a lo que me responde que había pillado al matrimonio en pleno maratón sexual mañanero encima de la mesa del salón, y que había salido sin que se diesen cuenta (la puerta estaba abierta) y a la vuelta volvería a entrar.

Bueno, volvemos a comer por la mediodía, nos vamos de nuevo a trabajar y yo tenía citas temprano de modo que no le acompañé, a la noche siempre nos contábamos como nos había ido el día y claro lo primero fue preguntarle por el matrimonio de marras y me dice:
-He hecho pedido, no se podía escapar.
-¿porqué?
-El tío que está mañana le estaba dando caña a la mujer, no era su marido, su marido es un tío grande brutal y el de esta mañana era más bien joven y poca cosa, empecé la charla y la tía fue a vaya el pedido desde el primer momento, y ya me cansé de ella y le dije que había estado por la mañana a tal hora y la puerta estaba abierta, la empezaron a temblar las piernas, y a la vez empezó a interesarse por el tema y al final acabó convenciendo al marido por la cuenta que la traía.

Hay mucho fantasma con corbata por ahí, pero se les ve de lejos. En la mesa y en el juego es donde se ve al caballero. Y los que presumen de que nadie les engaña son los primeros en caer, el que es zorro zorro te hace pensar que es un cateto y que no se entera de nada.

Y el que no se entera eres tú.

Aprovecho para recomendar un libro curioso:
El mejor vendedor del mundo de og mandino.

Lo presté y lo perdí, pero es fácil de encontrar, hay otros por internet.

La mejor anécdota hasta el momento: la de extraterroide y la mujer infiel.

Cita:

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Aprovecho para recomendar un libro curioso:
El mejor vendedor del mundo de og mandino. Lo presté y lo perdí, pero es fácil de encontrar, hay otros por internet.

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Vaya, supongo que, no te sirvió de mucho.

Por cierto, Jam, bien hecho lo de sumarle un 0 al super-empresario del sexto sentido. Ese como el niño de la película, veía fantasmas todos los días: cada vez que se miraba al espejo.

Cita:

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Por cierto, Jam, bien hecho lo de sumarle un 0 al super-empresario del sexto sentido. Ese como el niño de la película, veía fantasmas todos los días: cada vez que se miraba al espejo.

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Tengo que decir que mi intención no era la de timar a nadie, ni mucho menos. Mi intención era terminar cuanto antes con aquella patética situación.

Cita:

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La mejor anécdota hasta el momento: la de extraterroide y la mujer infiel.

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Esa es buena sí, es para conocer a ese excompañero, el tío era un peligro.

Las he tenido de todos los colores, incluso algunas para llorar, yo era bastante cabrito, mi mejor baza con el público es mi carácter, me gano la confianza muy rápido, y en casa de mis padres siempre ha habido negocios, de modo que he tratado con público desde muy joven, por cierto, uno de los mejores comerciales que he visto, se destetó en la sección de lencería del Corte Inglés con 20 años, era un crack.

Si queréis pudo contaros más, tengo una de una noche lluviosa que fue un show. Un saludo.

Pude leerlo un par de veces, es cortito. Sobre las leyendas urbanas de los trabajos puerta a puerta, no es que no me lo crea, pero ya se sabe, el butanero, el fontanero, la de amas de casa que se tiran (en su imaginación) siempre será menos de lo que se cuenta.

Yo también hice puerta a puerta con cierta empresa de libros.

Cita:

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Si queréis pudo contaros más, tengo una de una noche lluviosa que fue un show.

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Claro, hombre, para eso es este hilo.

No es ninguna leyenda, palabra, a ese compañero lo traté mucho, fue uno de mis mejores amigos y lo conocía a el y a toda su familia, no mentía, pero además el pedido que hizo, por suma y por lo que les colocó, no tenía explicación, además el cliente era conocido, se dedicaba a la maquinaria y yo hablé alguna vez con él, y me jugaría una cena a que, si no hubiera sido por la mujer ese no compra nada de lo que llevábamos en cartera. Un saludo.

Sigue sigue contando. Gekonidae: ya sabes, la realidad supera a la ficción.

Bueno, pues va la de la noche lluviosa. No recuerdo en pueblo fue, pero fue en la provincia de Badajoz (recorrí media España vendiendo), por alguna razón, estuve toda la tarde con un cliente, no recuerdo si le hice pedido, es posible que sí, porque si no veía venta, no duraba ni 15 minutos con el cliente, al salir, estaba cayendo el diluvio universal, yo, pues ya se sabe, traje con americana, me puse hecho una sopa, era un pueblo pequeño y mi jefe me llevo allí en el coche de la empresa que se llevó el por que iba a otro pueblo cercano, quedamos por la noche en la plaza del pueblo en un bar donde comí por la mediodía.

No sé si por que era tarde, o porque llovía a mares, pero el caso es que era de noche, y quedaba rato para que mi jefe volviera, de modo que tiré de clientes y fui a por el próximo, si no vendía, al menos estaba bajo techo, el pueblo estaba desierto total, llego, llamo al timbre, y sale una mujer joven, no se me olvidara, se llamaba Mariola, muy maja y guapilla, el marido era muy callado, pero no era maña persona, llegué hecho una sopa, calado hasta los gallumbos, Mariola enseguida me saca una toalla, me quita la chaqueta y saca un secador de pelo y se pone a secar la americana, yo estaba tan calado que no podía ni deshacerme el nudo de la corbata, estaba como pegado con cemento, y encima, se me tenía que notar que tenía frío, por el color de la cara y quizás porque fijo que hasta tiritaba un poco, de modo que el marido me dice que me de una ducha caliente, y deje que Mariola seque mi ropa, ok, va, yo como si estuviera en casa, el marido me saca unas pantuflas me las pongo y dejo los zapatos al lado de un radiador, me voy al baño, el marido me pasa un albornoz y me quito todo y se lo dejo fuera del baño, todo menos los gallumbos, me dió cosa meterle el marrón a la pobre Mariola, me pego una ducha calentita que me sentó, como dios, salgo al salón con el albornoz del marido, solo me faltaba irme a la nevera y pillar unas cervezas y decirle a Mariola que partiera el jamón, yo allí como si fuera el cabeza de familia, un show y yo lo estaba flipando, en albornoz abro el maletín y al ataque.

Pedido hecho, no me quedé contento, que el marido después de la charla ya se había soltado y no paraba de hablar de mil historias, me ofreció un vinos y echamos los tres en amor y compaña unos vinos, bueno me despido, al marido le doy un apretón de manos antológico y a la señora le planto un par de sonoros besos (me había dejado la ropa seca y calentita), en la calle, aún chispeaba un poco, pero poca cosa, miro el reloj. Dios. La una y media de la madrugada, salgo por una cuesta abajo como una bala, y a los 200 aparece el coche de la empresa, mi jefe estaba para darle un ataque de nervios (una vez intentaron violar a una compañera, dejo la empresa, una lástima, una gran chica y una gran comercial), monto en el coche, y se lo conté para tranquilizarlo, bueno, el pavo flipaba, pero os juro que conforme se lo conté yo me descojonaba, hasta ese momento no había caído como llegué y mandé en la casa, era el sargento de hierro, fastidiar, que pasada.

Otra vez os cuento la que tuve con un yonki en Zafra. Un saludo.

Bueno, yo no creo en tópicos, lo que dices es cierto como también lo es que cada uno se monta su realidad. No dudo lo que dice extraterroide, quería decir simplemente que no hay que tragarse cierto tipo de leyendas a menos que, como es el caso, lo hayas comprobado de primera mano.

Yo sólo digo que cuidado con los trabajos denominados comercial, a veces se explota a jóvenes con ganas de trabajar y les meten en la cabeza una serie de ideas precocinadas en las que no quiero entrar.

Hace poco me autodespedí de un fabricante del cuál era representante por la forma en la que ellos entendían el marketing.

El marketing sólo funciona si detrás hay gente buena y con las ideas claras, como las películas, debe haber detrás una buena historia y un buen equipo, creo yo.

Gekonidae, es cierto lo que dices. En este caso las anécdotas de extraterroide me parecen muy creíbles (y muy buenas, aprende Jam, que te enrollas como los abuelos contando historias de la mili en fascículos). Es verdad que hay gente que le pega un repaso a la realidad hasta dejarla irreconocible: esos suelen ser los mejores vendedores. Sin embargo, si estas un poco acostumbrado a ellos, les ves venir de lejos y con el tiempo eres capaz de sacar lo que haya de verdad en sus palabras y separarla del resto de adornos.

Después de más de 3 años (y desde le primer año superé el montante necesario para que me promocionaran como jefe de equipo), aún mi jefe no me promocionaba, era un vago, no salía a vender la mitad de las veces, de modo que el círculo vicioso estaba hecho, la mayor parte de sus ganancias venían de la gente de su equipo ¿cómo me iba a promocionar entonces? El caso es que unas navidades le di el ultimátum, o me tienes preparada la promoción a la vuelta de las vacaciones, o me piro, y me piré, para quedar bien, le di una venta, para asegurarme que iba a visitar al cliente (mi palabra es inamovible, si quedo con un cliente, allí estoy, aunque sea el diluvio universal), le hice pagar una comida para todo el equipo A cuenta de ese pedido.

Me fui y desde entonces tengo contacto con algunos compañeros/as, yo estuve bien, he de decir que era una gran empresa, vendíamos libros y material multimedia, entre otras cosas llevábamos productos de Microsoft y de Autodesk, no hablo de planeta, ni de ninguna casa enciclopédica, hablo de una de las más grandes editoriales educacionales del mundo, y por supuesto la número 1 en España, pero permitirme que no diga el nombre, porque si cuento ciertas anécdotas, van a quedar mal y no se lo merecen aunque ha buen entendedor, pocas palabras bastan.

Cita:

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Gekonidae, es cierto lo que dices. En este caso las anécdotas de extraterroide me parecen muy creíbles (y muy buenas, aprende Jam, que te enrollas como los abuelos contando historias de la mili en fascículos). Es verdad que hay gente que le pega un repaso a la realidad hasta dejarla irreconocible: esos suelen ser los mejores vendedores. Sin embargo, si estas un poco acostumbrado a ellos, les ves venir de lejos y con el tiempo eres capaz de sacar lo que haya de verdad en sus palabras y separarla del resto de adornos.

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Se supone que es un hilo para hablar de técnicas de venta y no de cuernos, por eso me parecen importantes los detalles, pero si hay que hablar de otros temas se bien también, y tú que gafas, que te cuentas?

Técnicas de venta eh. ¿Qué son para ti técnicas de venta? Piénsalo bien Jam, mi pregunta es una salida indía.

Lo siento, pero mi hora de trabajar ha terminado por hoy.