El estilo visual de la serie tiene una clara influencia del arte conceptual y la pintura digital, lo que le otorga una textura y profundidad única. Los fondos de la serie están meticulosamente detallados, con escenarios que parecen sacados de una obra de arte, mientras que los personajes tienen un diseño que combina rasgos estilizados con una sensación de realismo, lo que permite que sus emociones y expresiones sean claramente comunicadas. La fusión de 2D y 3D en la animación también es un aspecto destacado; las escenas de acción son dinámicas y fluidas, pero mantienen la estética de una animación pintada a mano.
Uno de los aspectos visuales más notables es el uso de la luz y el color. Arcane emplea una paleta de colores vibrante y contrastada, que varía según el entorno: la ciudad de Piltover está bañada en tonos dorados y luminosos, mientras que Zaun, el distrito subterráneo y opresivo, se caracteriza por colores más oscuros, fríos y sucios, reflejando las diferencias socioeconómicas entre ambos mundos. Este contraste visual ayuda a enfatizar la lucha entre las dos ciudades y los temas de la serie, como la opresión, el poder y la rebelión.
El diseño de personajes también es destacable, ya que cada uno tiene una silueta y características visuales que reflejan su personalidad y su rol dentro de la trama. Además, las animaciones faciales son extremadamente detalladas, lo que permite una gran carga emocional en las escenas clave. Los movimientos de los personajes, especialmente en las escenas de combate, se sienten fluidos y naturales, lo que le da un dinamismo impresionante a la serie.
En cuanto a la música, que fue compuesta por Alexandre Desplat (ganador de múltiples premios Oscar), también se fusiona perfectamente con el estilo visual, con una banda sonora épica que acompaña a las escenas de manera orgánica y amplifica la tensión y la emoción.
Este enfoque visual innovador fue un factor clave en el éxito de Arcane, y muchos lo consideran uno de los mejores ejemplos de animación contemporánea, no solo por su estética sino por cómo esta estética apoya la narrativa y los temas de la serie.