Este sábado miles de manifestantes pertenecientes a la generación Z han tomado las calles de Ciudad de México para protestar contra los altos índices de violencia que afectan al país. La movilización, que se desarrolla en un ambiente inicialmente pacífico, incluye fuertes críticas hacia el gobierno encabezado por Claudia Sheinbaum, a quien los participantes acusan de no implementar medidas efectivas para garantizar la seguridad ciudadana. La protesta refleja el descontento generalizado entre los jóvenes mexicanos frente a la creciente inseguridad.


Enfrentamientos con la policía al final de la manifestación

Al concluir la concentración, se registran enfrentamientos entre un grupo de manifestantes y los cuerpos policiales, lo que genera tensiones y disturbios en la zona. Las autoridades despliegan unidades antidisturbios para contener los altercados, mientras algunos participantes lanzan objetos y responden con resistencia a las intervenciones. Estos incidentes han provocado heridos leves y detenciones, según informan testigos presentes en el lugar.

Críticas hacia la gestión gubernamental

Los organizadores de la marcha destacan que la protesta busca visibilizar la frustración de la juventud ante la falta de avances en políticas de seguridad. Señalan que, aunque el gobierno ha prometido combatir la violencia, las acciones concretas han sido insuficientes y la situación continúa deteriorándose. La generación Z exige respuestas inmediatas y un cambio de estrategia para proteger a la población, especialmente a los más jóvenes, quienes se sienten vulnerables en su propio territorio.

Parece que las únicas cosas que avanzan rápido en este país son las marchas y los índices de criminalidad, una combinación tan eficaz como usar un paraguas en un huracán.