Un equipo de científicos ha logrado crear una versión realista del fluido de telaraña de Spider-Man mediante la extracción de fibras de capullos de polillas de seda. Este material presenta propiedades excepcionales de resistencia y elasticidad que superan a muchos materiales sintéticos actuales. Los investigadores destacan que este avance podría revolucionar múltiples industrias gracias a su composición natural y biodegradabilidad.


Aplicaciones en textiles y medicina

En el sector textil, estas fibras permiten desarrollar tejidos más resistentes y ligeros, ideales para ropa deportiva y equipamiento de seguridad. Simultáneamente, en medicina, se exploran aplicaciones para suturas biodegradables y andamios tisulares que favorecen la regeneración celular sin provocar rechazo en el organismo.

Potencial y sostenibilidad del material

La sostenibilidad es otro aspecto clave, ya que la producción de estas fibras requiere menos energía que los materiales convencionales y es completamente renovable. Los científicos continúan optimizando el proceso de extracción para aumentar el rendimiento y reducir costos, lo que facilitaría su adopción masiva en un futuro cercano.

Ahora solo falta que alguien invente un lanza-telarañas práctico para que podamos columpiarnos entre rascacielos sin problemas legales.