En la conferencia Q2B de Silicon Valley, líderes científicos y empresariales del sector de la computación cuántica destacan que se ha logrado un progreso espectacular hacia ordenadores cuánticos útiles y prácticos. Subrayan avances técnicos significativos y un aumento en la potencia de estos sistemas, lo que permite dar pasos reales para que superen a los ordenadores clásicos en tareas concretas. Este escenario optimista se basa en demostraciones recientes que validan el potencial de la tecnología.


Persisten desafíos clave como corregir errores y escalar

A pesar del optimismo, los expertos reconocen que existen desafíos importantes que resolver antes de que estos sistemas se usen de forma general en aplicaciones reales. Dos obstáculos principales son la corrección de errores cuánticos y la escalabilidad de los hardware. Corregir los errores de forma eficiente es crucial para mantener la coherencia de los qubits, mientras que escalar los sistemas a miles o millones de qubits útiles requiere superar grandes retos de ingeniería y control.

El camino hacia aplicaciones prácticas es gradual

El consenso apunta a que la adopción será gradual, con ordenadores cuánticos que primero resolverán problemas específicos en campos como la química computacional, la logística o las finanzas, donde ya se percibe su ventaja teórica. La industria se enfoca en desarrollar software y algoritmos para estas aplicaciones concretas, mientras los hardware continúan mejorando. La meta a medio plazo no es reemplazar los ordenadores clásicos, sino crear sistemas híbridos que aprovechen lo mejor de ambas arquitecturas.

Mientras tanto, en los foros, algunos usuarios bromean preguntando si el primer programa cuántico útil será para optimizar la cola de render de Blender o para calcular por fin los shadows en tiempo real sin consumir todo el VRAM.