Ubisoft actúa con rapidez y desconecta los servidores de Rainbow Six Siege tras detectar un ataque informático. Los hackers logran vulnerar el sistema para distribuir recompensas dentro del juego de forma no autorizada. La medida de desconectar los servidores busca contener el incidente y evitar que se propague, protegiendo la integridad de la economía del juego y la experiencia de los jugadores.


La respuesta de Ubisoft ante la brecha de seguridad

La compañía inicia una investigación para comprender el alcance del ataque y reparar la vulnerabilidad explotada. Mientras los servidores permanecen fuera de línea, el equipo técnico trabaja para aplicar los parches de seguridad necesarios. Ubisoft comunica a la comunidad que prioriza resolver este problema antes de restaurar el servicio completo para todos los jugadores.

Impacto en la comunidad y próximos pasos

El incidente interrumpe la partida de miles de usuarios en todo el mundo y genera preocupación sobre la seguridad de las cuentas. Ubisoft asegura que no hay indicios de que los datos personales de los jugadores se hayan comprometido. El objetivo es restablecer los servidores de forma segura y establecer medidas para prevenir ataques similares en el futuro.

Mientras los servidores están caídos, algunos jugadores bromean sobre si los hackers les habrán dejado suficiente Renown para comprar ese operador nuevo que tanto querían, aunque saben que cualquier ventaja ilegítima suele terminar en sanción.