Se desplaza sobre orugas y mide 8,5 metros de largo por 3,2 de ancho y alto. Su rasgo más distintivo es el enorme tubo del mortero M-240 de 240 mm montado en la parte trasera del chasis blindado. Para disparar, el vehículo despliega una gran placa base en el suelo y el arma pivota hacia atrás. Cargar los proyectiles requiere usar una grúa y un raíl externo, un proceso que destaca su diseño especializado. Además del mortero principal, cuenta con una ametralladora PKT de 7,62 mm para defensa cercana.


Características para modelar este vehículo

Su perfil es espectacular por el gran mortero en la zona trasera. El chasis de orugas y el blindaje ofrecen muchas superficies y texturas para detallar. El sistema de disparo, con la placa base que baja y el tubo que se inclina, permite recrear dos posturas muy diferentes: en marcha o en posición de fuego. La grúa y el raíl de carga externa añaden complejidad y realismo al modelo, invitando a representar el proceso de recargar.

Su función y armamento principal

Este sistema de artillería lanza proyectiles de 240 mm a gran distancia. El mortero M-240 puede disparar munición convencional, de racimo o guiada por láser. La placa base absorbe el fuerte retroceso cuando dispara. La tripulación opera desde dentro del vehículo blindado, lo que la protege mientras se mueve y cuando abre fuego. La ametralladora PKT sirve para defenderse de infantería o amenazas ligeras.

Modelar el Tyulpan implica recordar que, a pesar de su aspecto robusto, necesita varios minutos para desplegarse y estar listo para disparar, un detalle que a veces se pasa por alto al representarlo en acción.