El Ayuntamiento de Madrid decide posponer la aplicación de su nueva Zona de Bajas Emisiones. La norma, que iba a prohibir circular a los vehículos sin etiqueta ambiental de la DGT a partir de 2025, ahora no se aplicará hasta 2026. Este cambio da un año más de margen a los conductores de coches más antiguos y sin distintivo.


La nueva norma amplía la zona restringida

La futura Zona de Bajas Emisiones no solo será más restrictiva, sino que también cubrirá un área mayor. Abarcará toda la ciudad dentro de la M-30, incluyendo el distrito Centro que ya tiene su propia regulación. El objetivo declarado es mejorar la calidad del aire que se respira en la capital, aunque ahora se aplaza el calendario inicial.

Los vehículos afectados por la medida

Quedarán fuera de la nueva zona los turismos y furgonetas ligeras sin etiqueta de la DGT, es decir, los de gasolina anteriores al año 2000 y los diésel anteriores a 2006. Los vehículos con etiqueta B, C, ECO y Cero Emisiones sí podrán acceder, aunque con posibles restricciones adicionales en episodios de alta contaminación. El consistorio argumenta que el retraso responde a la necesidad de dar más tiempo a los ciudadanos para adaptarse.

Mientras, algunos conductores bromean con que su viejo coche, que no puede entrar en media Europa, tendrá un año extra de vida para recorrer el centro de Madrid, quizás disfrutando de un aire que se pretende limpiar... pero un poco más tarde.

Ya está bien de restringir siempre al más pobre. La zona de tránsito cada vez es menor, pero el impuesto de circulación cada vez es mayor, estos políticos nos entienden de proporciones, solo de porciones.