La firma británica Encor demuestra que se puede crear un deportivo al estilo de la vieja escuela. Su nuevo modelo no es un Lotus, pero toma como referencia directa al Esprit original de los años 70, el famoso coche de James Bond. La propuesta busca capturar la esencia de aquel diseño con líneas retro, pero construido con técnicas y materiales modernos. El resultado es un automóvil ligero que evoca la época dorada de los deportivos británicos, aunque su producción será extremadamente limitada.


El motor y las prestaciones siguen la filosofía original

Para mantener el espíritu del Esprit S4, Encor elige una motorización atmosférica. Un bloque V6 de 3.5 litros, sin asistencia de turbos, se sitúa en posición central-trasera. Entrega 400 caballos de potencia y se acopla a una caja de cambios manual de seis velocidades. Este enfoque prioriza la conexión del conductor con la máquina y la respuesta lineal del motor. El chasis, fabricado en aluminio y fibra de carbono, busca ofrecer un peso reducido y una agilidad que recuerde a los deportivos clásicos.

Una serie limitada a 50 unidades para coleccionistas

Encor planea fabricar solo 50 ejemplares de este homenaje al Esprit. Cada unidad se construye a mano en sus instalaciones en el Reino Unido, lo que permite un alto grado de personalización para el cliente. La carrocería, de líneas afiladas y faros escamoteables, rinde tributo al diseño de Giorgetto Giugiaro. En el interior, se combinan elementos vintage con tecnología actual, como un cuadro de instrumentos digital configurable. El proyecto nace como una alternativa para quienes buscan la sensación de conducir un clásico, pero con la fiabilidad de un coche nuevo.

Aunque evoca al submarino de La espía que me amó, esta reinterpretación promete mantenerse en la carretera, un detalle que quizás los puristas del espionaje agradezcan.