El Cormorant es un vehículo aéreo de despegue y aterrizaje vertical diseñado para operar en ciudades. Este aparato no tiene alas y usa rotores internos que protegen para volar en espacios reducidos. Su función principal es transportar pacientes o carga en misiones de emergencia médica. La empresa Urban Aeronautics desarrolla este concepto para integrar el transporte aéreo en el entorno urbano.


La fabricación aditiva reduce el peso y la complejidad

La impresión 3D permite fabricar muchos componentes estructurales y aerodinámicos del Cormorant. Este método de producción construye piezas complejas que son más ligeras que las hechas con técnicas tradicionales. Al reducir el peso total, el vehículo puede transportar más carga útil o aumentar su autonomía. También se pueden fabricar conductos de rotor internos con geometrías optimizadas que mejoran el flujo de aire y la eficiencia.

El diseño de rotores internos busca seguridad y maniobrabilidad

El sistema de propulsión usa rotores que funcionan dentro de ductos o canales en el fuselaje. Esta configuración protege las palas y aumenta la seguridad para operar cerca de edificios o personas. La aerodinámica de estos ductos es muy compleja y requiere diseños orgánicos que la impresión 3D puede materializar. Esto permite probar y refinar rápidamente las formas para controlar el aire que fluye a través del vehículo.

Parece que el mayor reto no es hacerlo volar, sino encontrar un lugar para aparcar en el centro de la ciudad.