La robótica da un paso decisivo hacia la integración en nuestros espacios cotidianos con Digit, el humanoide desarrollado por Agility Robotics. Este robot no es un simple prototipo de laboratorio, sino una máquina diseñada desde sus cimientos para trabajar de forma autónoma en entornos construidos para humanos. Su propósito principal es automatizar tareas de manipulación y transporte en almacenes y centros de logística, operando de manera segura junto a las personas y utilizando la misma infraestructura que nosotros, sin necesidad de modificaciones costosas.


Diseño y capacidades físicas

Digit posee una morfología bípeda con brazos, lo que le confiere una movilidad excepcional en un mundo diseñado para dos piernas. Sus piernas articuladas, que recuerdan a las de un ave, le permiten caminar, agacharse, girar y, de manera crucial, subir y bajar escaleras con soltura. Sus brazos no son meros apéndices, sino herramientas funcionales para cargar y descargar cajas de hasta 18 kilogramos. El robot puede plegarse sobre sí mismo para ahorrar espacio cuando no está en movimiento y está equipado con un conjunto de sensores, cámaras y LiDAR que le permiten percibir su entorno en 3D, mapearlo y navegar evitando obstáculos estáticos y dinámicos de forma autónoma.

Aplicaciones y futuro de la plataforma

El enfoque de Agility Robotics es claro: convertir a Digit en una plataforma fiable para la automatización de la cadena de suministro. Ya se está probando en escenarios reales, como la carga y descarga de furgonetas de reparto o la movilización de mercancías dentro de almacenes. Su capacidad para interactuar con contenedores, estanterías y vehículos lo posiciona como un candidato ideal para tareas repetitivas y físicamente exigentes. La visión a largo plazo no se limita a la logística; una plataforma móvil y manipuladora como esta podría eventualmente asistir en entornos domésticos o de retail, aunque su desarrollo actual está totalmente centrado en resolver los desafíos industriales primero.

Claro, con su elegante paso y su habilidad para llevar paquetes, pronto podríamos verlo en una competición por el empleado del mes, aunque probablemente no necesite los incentivos de la pizza los viernes. Su motivación es puramente eléctrica.