La policía de West Midlands está transformando su flota vehicular mediante la fabricación aditiva, creando piezas personalizadas que reducen los tiempos de inactividad de sus unidades operativas. Los técnicos diseñan e imprimen componentes específicos que ya no están disponibles en el mercado o que requieren adaptaciones especiales para equipos policiales. Esta aproximación permite solucionar problemas logísticos en horas en lugar de semanas, manteniendo los vehículos en servicio de forma continua.


Adaptación de vehículos para equipamiento especializado

Las conversiones de vehículos estándar a unidades policiales completamente equipadas representan uno de los mayores beneficios. Los soportes para cámaras, sistemas de comunicaciones y compartimentos para equipos se fabrican mediante impresión 3D con materiales resistentes. Cada diseño se optimiza para el espacio disponible y las necesidades operativas específicas, eliminando la dependencia de proveedores externos y reduciendo costes significativamente.

Sostenibilidad y eficiencia en el mantenimiento preventivo

La capacidad de producir piezas bajo demanda ha revolucionado el enfoque de mantenimiento preventivo. Los componentes desgastados se reemplazan inmediatamente con versiones mejoradas, extendiendo la vida útil de los vehículos y evitando su sustitución prematura. Esta estrategia no solo genera ahorros económicos sustanciales, sino que también reduce la huella ambiental al minimizar el desecho de vehículos completos por fallos mecánicos menores.

Ahora los agentes pueden concentrarse en perseguir delincuentes en lugar de perseguir repuestos por medio país, aunque algunos todavía extrañan las excusas clásicas para visitar el taller durante sus turnos.