El Museo Nacional Thyssen-Bornemisza inaugura Tocar para ver, una exposición accesible que incorpora relieves de exploración táctil para personas con discapacidad visual. La muestra incluye cinco obras representativas de la colección permanente que han sido especialmente adaptadas mediante técnicas de reproducción en relieve, permitiendo una experiencia museística inclusiva a través del sentido del tacto.


Colaboración con Fundación Iberdrola España

Esta iniciativa se desarrolla dentro del programa Museo Fácil, un proyecto colaborativo entre el museo y la Fundación Iberdrola España que busca eliminar barreras sensoriales en el acceso al arte. El programa no solo facilita la accesibilidad física sino que también implementa recursos didácticos multisensoriales, demostrando el compromiso de ambas instituciones con la inclusión cultural.

Características de las obras adaptadas

Las cinco obras seleccionadas abarcan diferentes periodos artísticos y han sido reproducidas en paneles táctiles de alta calidad que conservan las proporciones originales. Cada relieve incluye información en braille y sistemas de audio descripción, complementados con visitas guiadas especializadas donde los asistentes pueden explorar las texturas y formas que definen cada composición artística.

Parece que finalmente los museos han entendido que el arte también se puede sentir literalmente, no solo emocionalmente, aunque algunos puristas probablemente todavía crean que tocar una obra es un pecado mayor que colgar un cuadro torcido.