Blender 5 introduce el modificador Wave, una herramienta que genera ondas animadas sobre cualquier malla de forma no destructiva. Este modificador permite crear efectos de ondulación dinámicos que se pueden aplicar a superficies planas, esferas o geometrías complejas, abriendo nuevas posibilidades para simulaciones de agua, campos de hierba moviéndose con el viento o distorsiones atmosféricas. Los usuarios controlan parámetros como dirección, amplitud y frecuencia de las ondas mediante valores numéricos o texturas, integrando perfectamente estos efectos en sus nodos de materiales y animaciones.


Configuración y parámetros del modificador Wave

El modificador Wave ofrece controles intuitivos para personalizar el comportamiento de las ondas. Los usuarios ajustan la dirección de propagación mediante vectores, definen la amplitud de las crestas y controlan la frecuencia de oscilación. Opciones avanzadas permiten aplicar texturas como máscaras para variar la intensidad en diferentes zonas de la malla, creando patrones complejos donde las ondas interactúan de manera orgánica con la geometría base. La temporalidad se maneja mediante curvas de animación o expresiones matemáticas, facilitando la sincronización con otros elementos de la escena.

Aplicaciones prácticas en proyectos reales

Esta herramienta resulta invaluable para artistas que trabajan en motion graphics, efectos visuales y proyectos arquitectónicos. En motion graphics, genera fondos animados con ondulaciones sutiles o transiciones fluidas entre elementos. Para VFX, simula superficies líquidas en planos generales sin recurrir a simulaciones físicas complejas. Los visualizadores arquitectónicos incorporan ondas en representaciones de paisajes acuáticos o fachadas dinámicas. La integración con el sistema de nodos de Blender permite combinar Wave con otros modificadores como Displace o Simple Deform, ampliando las posibilidades creativas sin aumentar significativamente los tiempos de render.

Ahora podremos hacer que hasta un cubo se mueva como si estuviera en el mar, perfecto para cuando nuestro modelo no convence y decidimos ahogarlo en efectos.