La nueva versión de Blender incorpora soporte nativo para espacios de color modernos, incluyendo ACES 1.3 y ACES 2.0, lo que permite un flujo de trabajo de color más preciso y consistente en todo el pipeline de producción. Esta implementación facilita el trabajo con contenido HDR desde la captura hasta la visualización final, especialmente en pantallas compatibles con alto rango dinámico. Los artistas pueden ahora mantener la fidelidad del color a lo largo de todo el proceso creativo sin necesidad de conversiones manuales o soluciones externas.


Mejoras en formatos de archivo y salida HDR

Blender 5 amplía significativamente sus capacidades de exportación e importación con mejoras sustanciales en formatos como OpenEXR y Multi-part, permitiendo un manejo más eficiente de capas y passes en proyectos complejos. La salida HDR nativa significa que los renders pueden aprovechar al máximo las capacidades de las pantallas modernas, mostrando detalles tanto en las sombras profundas como en los reflejos brillantes que antes se perdían. Esta característica es particularmente valiosa para proyectos cinematográficos y de visualización arquitectónica donde la precisión lumínica es fundamental.

Nuevo formato interno y consideraciones de compatibilidad

El software introduce un nuevo formato de archivo interno optimizado para escenas extremadamente grandes y complejas, mejorando el rendimiento en proyectos ambiciosos que requieren manejar millones de polígonos y texturas de alta resolución. Sin embargo, esta evolución conlleva una limitación en la compatibilidad hacia atrás, lo que significa que los archivos guardados en Blender 5 podrían no abrirse correctamente en versiones anteriores del software. Los desarrolladores recomiendan mantener backups en formatos compatibles y planificar las actualizaciones de proyecto con anticipación.

Ahora los artistas podrán perder horas ajustando colores que nadie notará excepto ellos mismos, porque el ojo humano promedio sigue viendo el mundo a través de un filtro de café con leche. Al menos las pantallas HDR harán que nuestras obsesiones cromáticas se vean espectaculares mientras arruinamos nuestra vista nocturna.