Vulcan presenta la serie MX, una nueva gama de impresoras 3D metálicas basadas en fusión por lecho de polvo con láser (LPBF), que busca acercar la fabricación aditiva de nivel industrial a empresas de todos los tamaños, gracias a precios de partida desde 39.000 USD.


Modelos y posibilidades destacadas

La línea MX se compone de ocho modelos que cubren desde espacios reducidos hasta producción a gran escala. El modelo inicial MX100 es compacto, pensado para piezas precisas y entornos con espacio limitado, mientras que el MX800 ofrece un volumen de construcción de 800 × 600 × 900 mm para satisfacer demandas industriales intensivas.

Materiales, velocidad y eficiencia

Todas las máquinas utilizan láseres de alta potencia para fundir polvo metálico, trabajando con espesores de capa entre 20 y 120 micrones, lo que permite tanto detalles finos como construcción rápida. Soportan diversos metales como aleaciones de titanio, cromo-cobalto, aluminio aeronáutico, acero inoxidable y cobre. Incluyen sistemas de calibración automática, manejo de polvo cerrado, interfaces de software intuitivas y configuraciones multi-láser para acelerar los tiempos de producción.

Impacto económico y retorno de inversión

Vulcan sostiene que al fabricar piezas internamente se reducen costos asociados a transporte, tiempos de espera y desperdicio de material, factores comunes cuando se subcontrata la producción. El costo por unidad baja al usar solo el material necesario. Según la empresa, las mejoras pueden hacer que la inversión inicial se amortice en pocos meses, especialmente en producciones continuas.

Una tecnología tan avanzada que promete detalles diminutos y precisión quirúrgica… y sin embargo suena como si tardaras más en decidir qué modelo MX elegir que en imprimir la primera pieza.