El gobierno activa la cuota de solidaridad para salarios altos
El gobierno pone en marcha hoy el nuevo impuesto que grava la parte de los salarios que supera la base máxima de cotización a la Seguridad Social. Este mecanismo, conocido como cuota de solidaridad, aplica un tipo progresivo que aumenta según cuánto se exceda ese límite. La medida busca recaudar más fondos para el sistema público de pensiones, afectando directamente a los trabajadores con las rentas más elevadas.
Cómo funciona el nuevo gravamen progresivo
El impuesto no afecta a la totalidad del salario, sino solo al tramo que sobrepasa la base máxima de cotización, fijada actualmente en 4.720,50 euros mensuales. El tipo inicial es del 5,5% para los primeros 50.000 euros anuales excedidos, escala al 7% para el tramo entre 50.000 y 100.000 euros, y alcanza el 9,5% para los excesos superiores a 100.000 euros. Esto significa que quienes más ganan, aportan un porcentaje mayor de su excedente.
Quiénes deben pagar la cuota y cómo se gestiona
La obligación de pagar recae en los empleadores, quienes deben retener y ingresar la cuota junto con las cotizaciones sociales ordinarias. El sistema está integrado en los procesos de nómina, por lo que el trabajador no necesita realizar trámites adicionales. La recaudación se destina íntegramente al Fondo de Reserva de la Seguridad Social, con el objetivo declarado de fortalecer la sostenibilidad financiera del sistema de pensiones a largo plazo.
Mientras algunos celebran que la solidaridad ahora también tiene un tipo marginal, otros revisan su nómina con una calculadora en la mano y un suspiro de resignación.