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Aprende a dibujar con el cadáver exquisito tridimensional
Esta técnica avanzada del cadáver exquisito desafía a los artistas a construir una figura humana en tres partes separadas, pero con un enfoque estructural en perspectiva tridimensional. Un participante inicia el proceso al dibujar la cabeza de un personaje en una vista de tres cuartos. Este primer artista define la orientación y la línea de acción inicial del rostro, estableciendo un punto de partida espacial crucial para los siguientes colaboradores.
El torso se añade con base en coordenadas
El segundo artista no ve el dibujo de la cabeza. Solo recibe las coordenadas precisas de los puntos donde deben ubicarse los hombros, marcadas en el papel. Con esta información limitada, su tarea es imaginar y dibujar el torso y los brazos, completando la conexión con la cabeza invisible y eligiendo una pose que considere lógica o interesante a partir de esos dos puntos de anclaje.
Las piernas completan la figura imposible
Un tercer artista recibe el dibujo con la cabeza y el torso ya unidos. Su misión es finalizar la figura añadiendo las piernas y los pies, interpretando la pose general y el equilibrio del personaje. El resultado final es una figura humana completa que, aunque puede ser anatómicamente imposible o forzada, presenta un desafío de coherencia estructural, volumen y perspectiva que pone a prueba la habilidad para visualizar y conectar formas en el espacio.
El proceso garantiza sorpresas, como torsos que giran en direcciones opuestas a sus cabezas o piernas que intentan sostener posturas que desafían la gravedad, ofreciendo un ejercicio único de dibujo analítico.
