Gestionar el estrés y la ansiedad por separación en mascotas
Las mascotas pueden sufrir cuando se quedan solas en casa. Este estrés se manifiesta con comportamientos como destrozar objetos o vocalizar en exceso, lo que indica un verdadero sufrimiento para el animal. Para mitigar esto, es clave acostumbrarlos de forma gradual a los periodos de soledad, comenzando con ausencias muy breves que se van alargando poco a poco. Durante estas ausencias, se puede enriquecer su entorno con juguetes interactivos que dispensan comida o con música suave y relajante, lo que ayuda a distraerlos y a crear una atmósfera más tranquila.
La tecnología como herramienta de apoyo
Las cámaras de vigilancia para mascotas han evolucionado para ofrecer funciones muy prácticas. Los modelos con audio bidireccional permiten escuchar al animal y también hablarle con nuestra voz, lo que puede calmarlo. Algunas integran dispensadores de premios que se activan de forma remota, permitiendo recompensar al perro o gato por estar tranquilo. Esta interacción a distancia ayuda a reducir su ansiedad porque percibe que no está completamente aislado, y el dueño puede verificar su estado en tiempo real.
Implementar una rutina positiva
Más allá de los dispositivos, la base es crear una rutina predecible y positiva. Antes de salir, es recomendable dar un paseo largo o una sesión de juego para que el animal gaste energía. Ignorar las despedidas y los reencuentros efusivos también contribuye a normalizar las salidas. Combinar estos hábitos con el enriquecimiento ambiental y el monitoreo tecnológico forma un enfoque integral que gestiona el estrés de la mascota y previene los problemas de conducta asociados.
A veces, el único destrozado es el dueño al ver la factura del veterinario por los objetos ingeridos.