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La edición no destructiva preserva los píxeles originales
La edición no destructiva es un método para trabajar con imágenes que preserva los datos originales. Este flujo de trabajo permite aplicar ajustes, filtros y efectos sin alterar permanentemente los píxeles de la imagen base. Se logra usando capas de ajuste, máscaras y objetos inteligentes. Esto facilita modificar o deshacer cualquier cambio en cualquier momento del proceso, lo que ofrece una gran flexibilidad.
Las herramientas clave para editar sin destruir
Las capas de ajuste son fundamentales, ya que aplican modificaciones como brillo o color en una capa separada. Las máscaras permiten controlar con precisión dónde se aplican estos efectos, revelando u ocultando partes de la imagen. Los objetos inteligentes son contenedores que guardan los datos originales de una capa, incluso después de transformarla o filtrarla. Los filtros inteligentes se aplican a estos objetos y permanecen editables.
Ventajas de adoptar este flujo de trabajo
Este enfoque mantiene la calidad máxima de la imagen, ya que evita degradar los píxeles fuente con sucesivas ediciones. Favorece experimentar sin riesgo, porque cada paso es reversible. También optimiza el trabajo en equipo y las revisiones, al poder compartir archivos con toda la historia de ajustes intacta. Permite crear variaciones de un mismo proyecto de manera eficiente.
Imagina poder deshacer un ajuste que aplicaste hace una hora sin tener que empezar desde cero, como si el tiempo no pasara para tu imagen original.
