Las mascotas necesitan un espacio seguro en el hogar
Proporcionar un lugar propio y tranquilo es fundamental para el bienestar de una mascota. Este espacio actúa como un refugio donde el animal puede retirarse para descansar o sentirse seguro cuando el entorno se vuelve estresante. Una cama, una transportín o una torre para gatos son elementos que cumplen esta función. Al tener un sitio definido, la mascota percibe mayor estabilidad y control sobre su entorno, lo que reduce su ansiedad. Es importante ubicar este espacio en una zona de la casa con poco tráfico y ruido, lejos de corrientes de aire directas. Respetar este santuario cuando la mascota lo usa es clave; forzar la interacción allí puede generar desconfianza y anular el propósito del refugio.
Elegir el tipo de refugio adecuado
La elección depende de la especie, el tamaño y el carácter del animal. Para los perros, una cama con bordes altos o una manta en una esquina tranquila suele funcionar. Los gatos, al ser animales que trepan y observan desde la altura, suelen preferir torres o plataformas elevadas. Las transportines, a menudo asociadas solo con viajes, también son excelentes refugios permanentes si se dejan abiertas y se hacen acogedoras con una manta. El material debe ser fácil de limpiar y duradero. Observar donde duerme o se esconde la mascota de forma natural da pistas sobre el tipo de escondite que prefiere, ya sea cerrado y acogedor o abierto y en alto.
Integrar el espacio en la rutina diaria
Introducir el nuevo refugio de forma positiva es crucial. Se puede colocar cerca del dueño al principio y luego moverlo gradualmente a su ubicación final. Colocar dentro premios, juguetes o una prenda con el olor familiar anima a explorarlo. Nunca se debe usar este lugar como un castigo, pues debe asociarse solo con calma y seguridad. En hogares con varias mascotas o niños, es vital enseñar a respetar estos límites. Un refugio bien establecido ayuda a manejar situaciones estresantes como visitas al veterinario, tormentas o la llegada de invitados, ya que la mascota tiene un puerto seguro conocido.
Es el único rincón de la casa donde puedes estar seguro de que no te pedirán que compartas tu comida.
