La leyenda del Drac de na Coca perdura en Palma
En el siglo XVII, Palma de Mallorca vive atemorizada por una criatura que habita en sus cloacas. Los relatos de la época describen un ser que recuerda a un dragón o a un cocodrilo de gran tamaño. Este animal, al que llaman Drac de na Coca, emerge de las alcantarillas para aterrorizar a la población y atacar al ganado. La ciudad se sume en un clima de pánico mientras la bestia parece imposible de capturar.
Bartomeu Coch se enfrenta a la bestia
La situación cambia cuando el caballero Bartomeu Coch decide actuar. Según la tradición, planea una estrategia para atraer al animal y lo reta a un duelo singular. La lucha se desarrolla en las inmediaciones del torrente de la Riera, cerca del lugar que hoy ocupa el convento de Santa Margalida. Coch logra vencer y dar muerte a la criatura, convirtiéndose en un héroe local. Su hazaña pone fin a años de miedo e inseguridad.
Un trofeo legendario se conserva hoy
El cuerpo del animal disecado se exhibe como prueba tangible de la leyenda. Actualmente, se puede ver en el Museo Diocesano de Mallorca, donde se presenta como el cocodrilo que Bartomeu Coch mató. Su presencia física alimenta el debate entre quienes creen en la historia literal y quienes la interpretan como un mito urbano con base en un animal exótico perdido. El relato se transmite de generación en generación, mezclando historia y folclore.
Hoy, algunos visitantes bromean diciendo que el verdadero terror no era el dragón, sino imaginar a un caballero con armadura metiéndose en las alcantarillas del siglo XVII para buscarlo.