El Caso Ummo fue un bulo ufológico que fascinó a España
En los años sesenta y setenta, España vive un fenómeno ufológico peculiar. Un grupo de personas, principalmente en Madrid, recibe una serie de cartas y documentos técnicos complejos. Estos textos afirman venir de una civilización extraterrestre del planeta Ummo. Los supuestos ummitas explican su ciencia, filosofía y hasta su sociedad. Lo más llamativo es que se comunican en un español impecable, con términos técnicos y un estilo muy formal. Este detalle genera mucha curiosidad y alimenta la leyenda de que estos seres viven ya entre los humanos, camuflados.
La trama se complica con documentos y supuestos avistamientos
El caso no se limita a cartas. Aparecen fotografías de supuestas naves con el símbolo ummita, un tridente que parece la letra U mayúscula. También hay informes de avistamientos, como el famoso en San José de Valderas en 1966. Los documentos que envían son densos, llenos de matemáticas, física y diagramas. Este nivel de detalle hace que algunos investigadores lo tomen en serio al principio. La red se expande, involucrando a periodistas, ufólogos y curiosos que intentan descifrar si es real o un elaborado engaño.
El misterio se resuelve y se descubre la verdadera autoría
Con el tiempo, las inconsistencias y el estilo terrestre de los textos delatan la farsa. Investigaciones posteriores, y finalmente algunas confesiones, señalan a un pequeño grupo de personas como autores. Entre ellos destaca el español José Luis Jordán Peña, quien admitió su participación. Su motivación parece mezclar el deseo de experimentar con una parapsicología práctica y quizás una crítica social camuflada. A pesar de desvelarse como fraude, el Caso Ummo deja una huella profunda en la cultura ufológica española, mostrando cómo un relato bien construido puede capturar la imaginación colectiva.
El detalle irónico es que, para una raza interestelar tan avanzada, sus naves siempre parecían aterrizar en las afueras de Madrid y nunca, por ejemplo, en una playa de Cancún.